Diferencias de concepto ante los cuidacoches

Prohibir o no prohibir, parece ser la cuestión. ¿Mafias o gente necesitada? Mientras prohibiendo la actividad se puede desplazar un problema, legalizándolo se pueden abrir nuevos “quioscos” para los político
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"No queremos más inseguridad por los cuidacoches"

El legislador porteño del PRO, Roberto Quattromano, defiende su proyecto de ley para prohibir la actividad de los cuidacoches. Aseguró que el proyecto que impulsa el macrismo en la Legislatura porteña busca que "no siga creciendo la inseguridad que generan los cuidacoches". 
En ese sentido, Quattromano recordó las muertes ocasionadas en el desarrollo de esta actividad ilegal en la vía pública, y señaló que “La ciudad necesita que esta actividad sea prohibida, no regulada; han ocurrido muertes en las calles de Buenos Aires por la actividad de los cuidacohes. Y aunque no tengo las pruebas para poner a disposición de la Justicia, todos sabemos cómo funcionan estas mafias".

Quattromano criticó la propuesta presentada por el kirchnerismo, al afirmar que, "mientras nosotros impulsamos la prohibición definitiva, la oposición sostiene que este problema se debe a la falta de trabajo y pretende regular la actividad como si fuera lícita, sin tener en cuenta la necesidad que tiene la Ciudad de terminar con las mafias para que el espacio público siga siendo de todos", concluyó el legislador.

 

“Prohibir no es la Solución”

El Bloque del Frente para la Victoria (FPV) de la legislatura porteña, presentó un proyecto de ley para regular y ordenar la actividad de los cuidacoches, propuesta firmada por las legisladoras porteñas Gabriela Alegre y Claudia Neira. El proyecto implica establecer la creación de un "Registro de Cuidadores de Vehículos", que funcionaría bajo el ámbito de la Subsecretaría de Uso del Espacio Público, del Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad.

En  los fundamentos, las legisladoras sostienen que “quienes se desempeñan en este tipo de actividades en la vía pública, son personas que se encuentran en condiciones de vulnerabilidad social”. 

Alegre, sostuvo que: “la política represiva, que persigue a los cuidacoches, discrimina y estigmatiza a gran parte de ellos, quienes ejercen una actividad de mera subsistencia.” 

Alegre manifestó que: “el proyecto del PRO apunta a prohibir la actividad y desligarse de la responsabilidad del Estado de atender las situaciones de vulnerabilidad. Por eso, nuestra propuesta es organizar el uso del espacio, armonizar intereses y brindar un marco regulatorio. También habrá sanciones para los casos de incumplimiento”.

Tendrían prioridad para inscribirse las personas más necesitadas.

Asimismo, en caso de incumplimiento de alguna de las cláusulas establecidas, se podría revocar el permiso otorgado. Además, impone sanciones por cuidar coches sin autorización ypenas agravadas para aquellos que participen de su organización.

 

Como fuere, el problema se está debatiendo. O se viene una prohibición total o se considerará como una salida laboral para algunos, más o menos del mismo modo en que se han legislado otros escapes de la miseria llevándolos al escalofón de “trabajo” como ser cartonero o prostituta.

 

U.K.

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