Serie de
piezas de folclore argentino
tecnológico para
solista
En la esquina
derecha, rojo como Misiones,
un bombo legüero, en
el otro corner, pero no
muy lejos, o por lo menos
no tanto como los años
que los separan, un ordenador
portátil. El padre,
el abuelo o el bisabuelo
de la práctica musical,
la síntesis de Latinoamérica,
lo primero de lo primitivo;
contra el icono de la segunda
mitad de la segunda mitad
del siglo pasado; lo último
de lo avanzado. Como si
esto fuera poco, en el escenario
también hay dos teclados,
uno que necesita que el
músico lo conecte
a sus pulmones y otro que
sólo suena si la
computadora lo sopla. Si
el primer asalto entre pasado
y el futuro se diese el
Jueves a la noche en un
bar de San Telmo, Gaby Kerpel
sería el árbitro,
o un amigo comprensivo que
concilia entre los dos y
los une en alguna de las
fusiones más actuales
de la Música Popular
Argentina.
Sin
contar la infinidad de sonidos
diferentes que los procesos
y la edición digital
le permiten, un charango,
una tarka y un pincuyo completarían
la paleta tímbrica
del compositor también
conocido como King Coya,
que además de tocar,
a lo largo del show va alternando
entre proyecciones de lo
que estamos viendo desde
otro ángulo e imágenes
abstractas en sincro con
el ritmo, sin alcanzar a
comprender como lo hace
hasta que, antes de anunciar
los últimos temas
del set, nos confiesa que
no fue un trabajo solo de
él, sino también
de un colaborador que ahora
está atrás
de la barra.
En el mes de agosto el creador
de la música de "De
La Guarda" y "Fuerza
Bruta" va a estar presentando
temas nuevos y versiones
de su primer y único
disco solista producido
por Gustavo Santaolalla.
Lifo
Fernández
[email protected]
Revista El Abasto, n°
101, agosto, 2008.