Nos
reunimos con el director
del CGPC5
(Almagro y Boedo), Marcelo
Bouzas
“Yo
quiero un cambio, quiero
que mis hijos puedan salir
tranquilos, quiero dormir
cuando salgan, hoy no duermo.”
Nos
costó un poco llegar
a Marcelo Bouzas, por un
lado las entrevistas, al
igual que con Casabella,
descubrimos que se autorizan
centralmente. Pero por otro
lado Bouzas está
a mil. Tres celulares, dos
teléfonos, todo sonando
a la vez. Lo compadezco.
Bouzas es vecino de Boedo
(y desde luego hincha de
San Lorenzo) y viene siendo
el secretario general del
partido en lo que hoy es
la Comuna 5, desde el 2005.
Ante mi pregunta por si
sería el candidato
para la comuna dijo lo mismo
que su colega del CGPC3:
“en el PRO somos un
equipo, irá quien
sea el mejor candidato”.
Bouzas
me cuenta que era vendedor
y que se unió al
PRO porque buscaba un cambio.
Lo habían robado
como cuarenta veces a mano
armada, de las cuales dos
veces estaba con sus tres
hijos (trece y dos mellizos
de diez).
Apenas
tiene un minuto libre entre
llamados, me cuenta que
“la transición
en este CGP fue buena con
Guillermo Agresta, la verdad
que no me puedo quejar,
pero no puedo decir lo mismo
de lo que fue a nivel Ministerio
con Roy Cortina, un desastre
total, lo que tocás
está infectado de
problemática, de
cosas extrañas, problemas
contractuales. El edificio
de Medrano 14, la sede donde
nosotros nos tendríamos
que mudar, nos hemos encontrado
que no dan los metros, está
sobreconstruido, el contrato
para nosotros es un contrato
leonino.”
Y
le pregunto: ¿Pensás
que en esta corta gestión
van a poder tener una sede
de la comuna propia dentro
de los barrios?
(El CGPC5 es el único
que no está situado
dentro de los barrios que
administra).
“Sí,
estamos trabajando en eso.
Casualmente estaba hoy la
subsecretaria hablando del
tema del presupuesto para
ver si podemos comprar una
propiedad en vez de alquilar.
La idea es que el vecino
tenga en su comuna, su sede
propia, no un alquiler.
Creo que parte de la mala
gestión se ha venido
practicando dentro de lo
que fueron los gobiernos
que nos antecedieron. En
los escalafones no había
un diálogo, conexión.
Esto no nos pasa a nosotros,
porque obviamente nosotros
somos todos del PRO. Acá
por más que haya
un frente donde vean gente
de varios partidos políticos,
todos están compenetrados
en lo que es el PRO, el
jefe es Mauricio Macri,
y los lineamientos se cumplen,
más allá de
la operatividad, a rajatabla.”
¿Con
los vecinos vienen, muchos
reclamos?
“Bien, bien, reclamos
muchísimos, cosas
pendientes desde el año
1999. Cuando abrimos la
pantalla de reclamos, estamos
tratando de hacer una limpieza
viendo qué está
cumplido, qué no
lo está, qué
está reiterado, a
estos últimos le
estamos dando prioridad,
a los que vienen de hace
tiempo, pero es complicado.
Como yo le digo a la gente:
el cemento para fraguar
tarda 72 horas, o sea todo
lleva un proceso, no es
que enseguida se secó.”
¿Contame
como va el tema de la Plaza
de Boedo?
“Estamos trabajando.
Va a depender de este CGP
específicamente.
Con el tema de la iglesia
ya está solucionado,
ya está expropiado,
nosotros calculamos que
en un tiempo breve se tiene
que estar pagando la expropiación,
o sea, se estará
comprando la plaza. También
se cambió la zonificación
a la urbanización
parque. Está bien
encaminada”.
Luego
me cuenta cómo al
no haber hecho una carrera
política tradicional
entiende su gestión:
“Yo viví 45
años del otro lado
del mostrador; no te digo
todas, hay gente muy potable
dentro del Gobierno de la
Ciudad que viene trabajando
hace muchos años
y que se esmera todos los
días para dar una
respuesta, pero he vivido
muchas circunstancias durante
45 años en las cuales
nadie me daba una respuesta.
Entonces todo esa mala experiencia
que yo viví como
vecino, ciudadano, contribuyente,
ponele el título
que quieras, hoy quiero
decir: «no, esto no
quiero hacerlo, esto no».
Si yo no te puedo dar a
vos una solución,
te tengo que dar por lo
menos una respuesta y explicarte
porque no te puedo dar una
solución, no te puedo
cortar el teléfono
y no decirte nada y dejarte
que vos te quedes colgado
en el insulto, en la bronca
y generes mas bronca y contagies
tu bronca a todo el mundo
y que vengan después
todos juntos acá
a decirme «usted qué
respuesta me está
dando».”
¿Cómo
llegaste vos al PRO, a través
de la militancia, cómo?
“Mauricio Macri vino
en septiembre del 2002,
juntaba a los vecinos en
una casa de algún
vecino del barrio. Por intermedio
de la fundación me
conecté, me parecía
piola la propuesta, veía
en él a un tipo ganador,
exitoso en su gestión
en Boca. Había vivido
más de 40 asaltos
a mano armada, me robaron
cuatro vehículos.
Yo hacía la cobranza
de mi empresa, mi profesión
es vendedor. Tuve un minisecuestro
con mis tres hijos, nos
metieron en la villa Carlos
Gardel en Caseros y nos
dejaron en pelotas a los
cuatro, hoy todavía
sufren las consecuencias
de eso, cuando cruzamos
la General Paz les veo las
caras. Por eso aposté
a un cambio.
“Cuando
algunos hablan contra la
mano dura yo quisiera ponerlos
del lado mío y preguntarles
que harían con 40
asaltos, que a tus hijos
le saquen la ropa y los
dejen en calzoncillos”.
-
¿Pero te buscan a
vos o esto es casualidad?
-
“No, no esto es casualidad,
esto es cotidiano. Yo de
las 40 denuncias he hecho
5, por cansarme de estar
4 horas en una comisaría
y que me digan «no
podemos hacer nada»,
entonces qué voy
a ir a hacer, a perder el
tiempo porque me robaron
$ 1000, $ 300 o el celular
o el reloj...”
-
¿Pero sos un tipo
ostentoso?
-
“¿Vos me ves
ostentoso a mí?”
-
No, para nada, por eso te
pregunto.
-
“No tengo nada [y
muestra que ni lleva cadenita,
ni reloj costoso], soy un
tipo normal, vivo en un
barrio normal. Estamos hablando
de un partido de San Lorenzo
- Racing. Íbamos
a la cancha con mis hijos
a ver a San Lorenzo, me
cruzan un auto, yo tengo
un Twingo modelo 1998, o
sea, no soy millonario.
Bueno, se bajan tres pibes
abren la puerta y se meten
adentro del auto. ¿Qué
tenés que hacer?
O te quedás en tu
casa encerrado detrás
de una reja y no salís
más, o participás
y ves si podés cambiar
algo desde el marco de la
justicia. Yo quiero que
se cumpla la ley, no quiero
otra cosa. Quiero un cambio,
quiero que mis hijos puedan
salir tranquilos, quiero
dormir cuando salgan, yo
no duermo.
“Si
estamos defendiendo a los
que están al margen
de la ley estamos en el
horno. Si estás robando
por la calle tenés
que ir preso, después
trataremos de ver con algún
programa si te recuperamos,
si te reinsertamos en la
sociedad, que hay 50 millones
de programas e ideas para
hacerlo, ahora, al margen
de todo esto, mientras tanto
tienen que estar encerrados,
no hay mucho para analizar.
Vivimos nosotros encerrados
detrás de una reja,
no los chorros; los vecinos
están encerrados.
Creo que el vecino votó
un poco esto, creo que votó
tener un poco más
de seguridad y orden.”
¿La
gente viene mucho con el
tema de la seguridad?
“Si. Tenemos problemas
acá con la seguridad,
con que no le anda la luz,
o sea todo termina en el
tema de la seguridad. Te
dicen tendrían que
cortarnos la rama del árbol
porque las luces se tapan
y a la noche es un problema
porque nos roban, tiene
que tapar el agujero que
está abajo del túnel
de Yatay o poner una reja
porque en ese hueco se esconde
la gente y a la noche nos
roban. El paredón
éste tiene que levantarlo
5 metros porque a la noche
saltan y nos roban. Todo
así es. Todo el reclamo
es por esto. Hay un pozo
en tal calle y tenemos que
frenar y cuando frenamos
vienen y nos roban.”
“Estoy
buscando un edificio para
hacer el CGP. Agarro el
listado y me aparece Gascón
123 como un edificio del
Gobierno de la Ciudad, y
está tomado, son
7 pisos. [...] “Piden
propiedades. Pero ¿por
qué no averiguan
bien quién entregó
estas propiedades? Alguien
que estaba dentro de las
filas de ellos fue quien
entregó todas las
casas que están tomadas
dentro de Boedo, Almagro
y Caballito.”
-
O sea ¿casas del
gobierno que fueron tomadas?
-
“Claro. Y no quedó
una propiedad del gobierno
sin tomar.” Y agrega:
“yo no te voy a convencer
ni ideológica ni
partidariamente, pero hay
cuestiones básicas.
Hay cosas que en el sentido
común están
muy claritas y determinadas.”
Para cierre
de la entrevista sirvió
uno de los tantos llamados,
de los cuales se disculpaba,
que dejó su cara
pálida de espanto
y preocupación. Una
tragedia: un perro había
mordido un cable de alta
tensión y su amo
al intentar sacarlo quedó
también electrocutado.
Me fui conmovido por el
señor y el perro
electrocutado, el estrés
por el trabajo de Marcelo
Bouzas además de
la historia de los múltiples
robos a mano armada.
R.S.
Revista
El Abasto, n° 95, enero/febrero,
2008.