Buenos
Aires, principal escenario
del tango
Si
pensamos en el recorrido
histórico del tango
como movimiento cultural,
no podemos pasar por alto
la cantidad de escenarios
que vivió.
Como
muchos saben el tango surgió
en las orillas del Río
de la Plata, como movimiento
marginal. Por lo que su
primer escenario podríamos
decir, fue el puerto y sus
orillas. De ahí,
se desprende el movimiento
del tango “orillero”,
que tiene su propia cadencia,
y sus característicos
pasos.
Unos
años más tarde,
Buenos Aires se expandió,
y los suburbios se fueron
loteando y achicando. El
tango continuó su
curso, y llegó a
las fondas y mercados. El
Mercado de Abasto es uno
de los principales escenarios
recorridos por este movimiento
popular. En las tardecitas,
los trabajadores del mercado
se juntaban a la salida
para ir a jugar a las cartas
y escuchar a los cantores
y payadores en las fondas
de los alrededores. En las
esquinas del barrio, los
compadritos practicaban
sus pasos para deslumbrar
a las minusas en el baile
del sábado.
Poco
a poco, el tango fue conociendo
el escenario de las plumas,
las medias de red, y las
bataclanas. De las ventanas
de los burdeles salían
los compases de las mejores
orquestas, y a través
de ellas se podía
ver el sensual y prohibido
baile. Las clases altas
miraban ese escenario con
asco y malos ojos, sin saber
que sus lujosos salones
iban a ser el marco perfecto
para las veladas tangueras.
Así fue como a mediados
de los años 40, el
tango danza, pasa a ser
tango salón. Se estiliza
el baile, los pasos son
más largos, el abrazo
es más distante,
y los compases más
suaves.
Si
pensamos en escenarios,
inevitablemente vamos a
pensar en teatros, calle
Corrientes, Broadway, luces
y aplausos. El tango llegó
a todos esos escenarios
de la mano de muchas compañías
contemporáneas de
danza, que auspiciaron de
embajadores del tango en
el exterior, así
como también lo fuera
la Fragata Sarmiento, el
escenario náutico
del tango por excelencia.
Sin
embargo, el mejor escenario
que puede tener el tango,
es, sin lugar a dudas, Buenos
Aires. Ciudad que a pesar
de haberle dado vuelta la
cara en sus inicios, lleva
en sus entrañas la
melancolía y la nostalgia
que caracterizan cada sonido
del 2x4.
Catalina
Cabana
[email protected]
Revista El Abasto, n°
96, marzo, 2008.