En
este número presentamos
dos posibilidades de lugar
de nacimiento de Carlos
Gardel
Made
in T…
Carlos
Gardel era rioplatense.
No dudamos de su arraigo
porteño y a su querido
y elegido vecindario del
Abasto. Sin embargo, al
igual que muchos porteños
de la época, se dice
que no había nacido
acá. En este número
pretendemos presentar una
disputa sobre su país
de origen que lleva ya muchos
años y que se podría
resolver con unos análisis
de ADN.
Hay diferentes pistas, con
mayor o menor documentación
y pruebas. En principio
podríamos dividir
las versiones en dos y reconocer
que ambas tienen, o tuvieron,
diferentes intereses. Esas
versiones indican o que
Gardel nació en Tacuarembó,
Uruguay o en Toulouse, Francia.
Sin duda, podrían
estar teñidas de
chovinismo, tanto del lado
uruguayo, para apropiarse
del nacimiento de El Mago,
como del lado argentino
para no permitir cederle
eso al paisito de al lado.
Sin embargo, cuando uno
entra a investigar más
va notando que hay argentinos
que creen en la teoría
uruguayista y uruguayos
que creen que nació
en Toulouse.
A su vez hay otros intereses
en juego, que pueden ser
desde conseguir apoyo en
Francia para montar un circo
sobre el mito de Gardel,
hasta recrear un pueblo
entero en torno de su figura
en Tacuarembó. Tampoco
podemos obviar que la teoría
francesista nace con el
juicio sucesorio. Luego
esta teoría toma
forma con dos obras supuestamente
biográficas, escritas
y publicadas pocos años
después de su muerte.
Una pertenece a Francisco
García Jiménez,
Vida de Gardel contada por
Jose Razzano (1946) que
más que una biografía
de Gardel, es una aproximación
a las memorias de Razzano.
La otra obra es de Armando
Defino, apoderado de Gardel
desde 1933, en reemplazo
de Razzano, y su albacea
testamentario. La obra se
llama Carlos Gardel. La
verdad de una vida y es
de 1968. Es, sin lugar a
dudas, una respuesta a las
muchas intrigas tejidas
en su contra. Según
Nelson Bayardo: “La
explicación -muy
sencilla, pero que no se
quiere ver- viene por el
lado de que el testamento
fue una vulgar defraudación
al fisco argentino, para
que Berthe Gardès,
pasando por madre biológica
del cantor, se quedara con
su herencia.”
Para los que sostienen la
teoría toulousense
Gardel simplemente utilizó
la ciudadanía uruguaya
para evitar servicio militar
y guerra en Europa.
Brevemente
las dos versiones
La historia oficial que
predomina en la Argentina
prefiere escuchar que Carlos
Gardel es el único
hijo de una joven madre
soltera, la planchadora
francesa Berthe, que lo
habría dado a luz
en Toulouse, Francia en
1890 y que a los pocos años
se habrían embarcado
para Buenos Aires, siendo
criado aquí, en Balvanera,
hasta sus andanzas por el
Abasto y su posterior despliegue
internacional. La llamaremos
la teoría toulousense.
Sus dos ases en documentación
consisten en el acta de
nacimiento en Toulouse de
Charles Romuald Gardès
y, tal vez más importante,
un testamento hológrafo
(escrito a mano) donde Gardel
dice ser ése y que
es hijo de doña Berthe.
La teoría tacuaremboense,
es un tanto más compleja.
En resumen, Gardel nacería
fruto del encuentro entre
un coronel casado, de nombre
Carlos Escayola, y de una
joven ahijada y cuñada
suya de 14 años,
María Lelia Oliva,
en una relación no
aprobada. Habrían
dado su hijo con dinero
para que lo cuide una joven
planchadora francesa de
nombre Berthe quien pronto
quedaría embarazada
y viajaría a Francia
dejando al joven Carlos,
que habría nacido
entre 1881 y 1887 (Avlis
1881, Bayardo 1883 y según
algunos documentos, 1887),
al cuidado de una amiga;
Annais Beaux. Una vez que
el hijo biológico
de doña Berthe tiene
tres años viajan
nuevamente a Buenos Aires
y Berthe buscaría
a Carlitos y se instalarían
los tres en Buenos Aires.
Hay entonces dos niños:
el hijo de Escayola -quién
será después
nuestro glorioso cantante-
y Charles Romuald, hijo
biológico de doña
Berthe, el niño de
brillantes calificaciones
del primero al sexto grado
que menciona la historia
oficial y que después
desaparece.
Las
pruebas y sus argumentaciones
La versión toulousense,
si bien suena coherente
y tiene su documentación,
tiene sus baches señalados
por investigadores y periodistas,
no solamente uruguayos,
sino también argentinos
y de otros países.
Consultamos a Juan Carlos
Esteban que lleva editados
varios libros* sobre el
tema y él da como
prueba una serie de documentos.
Los más destacados
son, como decíamos
más arriba, el testamento
holográfico (para
que su madre adoptiva heredase
y que los tacuaremboenses
descartan como truchado)
y el acta de nacimiento
de Charles Romuald Gardès
(que los tacuaremboenses
atribuyen a otra persona).
Como testimonial Esteban
recuerda, en su libro Tango,
vigencia y crepúsculo
que “La familia Franchini,
con la que convivió
cinco años, -1896-1901-
hasta que su madre lo inscribió,
internado, en los Padres
Salesianos, aportó
datos y recuerda su infancia”.
Según Esteban hay
información sobre
el ciclo escolar “por
medio de certificados, diplomas
y fotografías proporcionadas
por la madre”. Habría
pasado por la Escuela Superior
de Niñas [sic] 6,
Talcahuano 678; Escuela
Elemental de Varones N°
2 del Distrito Libertad
455; Colegio Pío
IX; Yapeyú y Don
Bosco. Y San Estanislao,
Tucumán 2646. El
2 de abril de 1912 firma
contrato con la firma Tagini,
quienes grabaron sus primeros
discos. Para esa ocasión
presenta un documento falso
con el nombre de Carlos
Gardel. Ese documento consta
en el Centro de Estudios
Migratorios Latinoamericanos,
según Esteban, y
agrega que viene alternando
de apellido. “Deja
definitivamente de usar
Gardes el 26 de agosto de
1913 dado que ese mismo
mes se promulga la ley que
se refería a franceses
residentes en el extranjero”.
Un documento del que hay
constancia es el acta de
la Policía Federal
de cuando Berthe el 30 de
enero de 1913 busca a su
hijo Charles Romuald Gardès
que define como “francés
de 22 años, trigueño
pelo castaño oscuro,
ojos marrones, tiene una
cicatriz cortante sobre
el lóbulo de la oreja
derecha, es grueso y alto”.
A la investigadora Martina
Iñíguez le
llama la atención
por qué la madre
no lo define como cantor,
ni deja entreabierta la
posibilidad de que lo encuentren
como Gardel, o como “el
Morocho del Abasto”,
puesto que en ese entonces
ya era conocido así.
“¿No será
que buscaba a su hijo biológico?”
Se pregunta Iñíguez.
Según Esteban, en
1915 habría sido
convocado, como todo francés,
para ir a la Primera Guerra
Mundial. El documento trucho
le habría servido
como salvoconducto para
evitar participar de semejante
tragedia.
Para Iñíguez
la teoría de eludir
servicios militares no tiene
fundamentos: “Según
información que me
fue dada en el Consulado
francés de Buenos
Aires cualquier ciudadano
nacido en Francia que solicitara
la nacionalidad de su país
de residencia antes de los
18 años de edad,
no sería llamado
a las armas en caso de guerra
por su país de origen
porque ya no era francés.
Las reglamentaciones al
respecto siguen siendo las
mismas desde esa época.”
Se sabe que el 10 de octubre
de 1920 se registra en el
Consulado Uruguayo, en vísperas
de su viaje a España
y Francia, como nacido el
11 de diciembre de 1887
en Tacuarembó y con
el apellido de Gardel. No
presenta constancia, únicamente
dos testigos. Con este certificado
obtendrá luego cédula,
carta de ciudadanía
y pasaporte argentino.
El 7 de octubre de 1933
suscribe el famoso testamento
holográfico ratificando
ser hijo de Berthe Gardès,
nacido en Toulouse, Francia
el 11 de diciembre de 1890,
“protocolizado por
la Escribanía Ibáñez,
ratificado por testigos,
aceptado por los jueces
y confirmada su autenticidad
en el 2005 por los peritos
calígrafos Dres.
Torre y Fenoglio”,
nos recuerda Esteban.
Un argumento fuerte, según
Esteban, por el cual nos
envió su aporte,
es el Juicio Sucesorio en
Uruguay donde la justicia
oriental falló a
favor de Berthe Gardès
como heredera universal
de los bienes de su hijo
Carlos Gardès o Carlos
Gardel, teniendo como base,
entre otros elementos, la
partida de nacimiento de
Toulouse y el testamento
hológrafo de 1933.
Además, según
lo que investigó
Esteban, Berthe no tiene
asentada una salida de Francia
hasta que viaja con su hijo
en 1893.
Sin embargo, la documentación
legal existente sobre Gardel
mientras viajaba siempre
le asignaba origen uruguayo.
De hecho el pasaporte que
se encontró chamuscado
junto su cadáver
luego del trágico
accidente aeronáutico
en Medellín, lo da
como nacido en Uruguay.
Y el Acta de Defunción
producida en Medellín
según registra Mario
Baptista**.
Gardel declara incontables
veces a la prensa de Uruguay
que es nativo de ese país.
Por ejemplo, “En una
época tan temprana
como 1915, cuando nadie
podía predecir el
éxito futuro del
dúo Gardel- Razzano,
el periódico El tiempo
de Montevideo, habla del
dúo como ´nuestros
paisanos uruguayos´”.
En el último reportaje
en Medellín: “Mi
corazón es argentino,
pero mi alma, uruguaya,
porque allí nací”
(revista Careta, de Antioquia,
Colombia, año 1935,
edición n° 1.054).
Pero lo que haya dicho la
prensa no son pruebas contundentes
según la mirada toulousense,
dado que podría estar
encubriendo su mentira.
Iñíguez insiste
en que otra prueba de que
Carlos Gardel fue a una
escuela en Montevideo (N°27,
Durazno 337) -antes de venir
con Berthe a Buenos Aires-
basándose una fotografía
de la cual se desprendería
el lugar donde fue tomada.
Además, otras fotografías
que le han tomado acompañado
demostrarían su edad.
En una fotografía
infantil de Carlos Gardel
con Francisca Franchini
tomada antes de 1894 (fecha
que se desprendería
por el logo de la casa que
tomó la foto): “si
siguiéramos la teoría
toulousense, debería
ser un niñito de
tres años, y la foto
lo muestra de nueve años”.
Esta versión suple
la carencia de una partida
de nacimiento con la declaración
que hace Gardel ante el
Consulado Uruguayo en Buenos
Aires en 1920 como nacido
en Tacuarembó, de
padres “Carlos y María,
ya fallecidos”. Para
los de la tesis toulousense
eso demuestra su intención
de evadir el servicio militar
y luego la Primera Guerra
Mundial. Para los tacuaremboistas
demuestra que es hijo de
“Carlos y María”.
Según Baptista el
informe forense está
fechado el 24 de junio de
1935 en Medellín,
donde Gardel murió
en el accidente aéreo.
El texto identifica el cadáver
“de 48 años
de edad, uruguayo, de la
ciudad de Tacuarelo, provincia
de Montevideo (sic)”.
En el documento se confunde
Tacuarembó con Tacuarelo
y convierte en provincia
a la ciudad de Montevideo
aclara Baptista. Según
Esteban el expediente de
defunción del 25
de junio de 1935 (Medellín)
reza: “Carlos Gardel,
oriundo de Argentina, de
40 años, más
o menos, soltero, hijo de
Berthe Gardel”.
En
resumen
Los que defienden la versión
toulousense sostienen que
los documentos de Gardel,
como su registro de nacimiento,
su cédula y sus pasaportes,
son falsos.
A su vez, los defensores
de la versión tacuaremboense
ponen en duda al testamento
que se da a conocer cuando
Gardel muere, ya que éste
justificaría el malentendido
de su nacionalidad francesa
como una maniobra legal
para que Berthe Gardès
(madre adoptiva según
esta teoría) pudiese
heredarlo en su testamento
de acuerdo con las leyes
argentinas de la época.
Sin lugar a dudas faltan
pruebas más contundentes
para tomar partido. Una
prueba para desasnarnos
definitivamente sería
una serie de análisis
de ADN para cotejar con
Berthe Gardès y con
los presuntos padres biológicos
del Uruguay.
Lo único es que uno,
por momentos, se pregunta
si realmente vale la pena
saber la verdad o si el
enigma en torno a su lugar
natal no justifica los emprendimientos
que se montan en torno a
su figura: el turismo en
Tacuarembó o la movida
en Toulouse; además
de los debates en torno
a su lugar de origen, que
incluye ediciones de libros
y revistas como ésta.
Como fuere, Gardel siempre
fue y será indiscutidamente
el Morocho del Abasto, El
Mago, El Zorzal que “cada
día canta mejor”.
Rafael Sabini
* Carlos Gardel. Encuadre
histórico, Corregidor,
Bs. As. 2003. Carlos
Gardel, sus antecedentes
franceses, coautor
junto con Monique Ruffié
de Saint-Blancat y Georges
Galopa, Corregidor, Bs.
As., 2006. Tango Vigencia
y crepúsculo, Corregidor,
Bs. As. 2007.
** Revista Notas Musicales,
n° 2, publicación
trimestral de la Cátedra
Libre “Historia de
la música popular
hispanoamericana”
de la UCLA, Venezuela.
Revista El Abasto, n°
99, junio, 2008.