Abortaron
desalojo en Almagro
Una jueza ordenó
un desalojo de un hotel
donde habitan ochenta familias,
ubicado en pleno Almagro,
en Corrientes y Acuña
de Figueroa. Luego de que
fuerzas policiales se apostaran
en la entrada del edificio
con propósito de
desalojarlo la jueza decidió
suspender el operativo.
Esta
mañana, desde las
cinco de la madrugada, se
comenzaron a juntar una
gran cantidad efectivos
policiales frente
a un edificio ubicado en
la avenida Corrientes y
Francisco Acuña de
Figueroa, en el barrio de
Almagro, donde según
un vocero policial, habitan
80 familias. Seguían
la orden judicial de desalojo
impartida por el Juzgado
Nacional de Primera instancia
en lo Civil número
57 a cargo de la doctora
Graciela Paradiso
Fabbri.
La
situación se mantuvo
durante varias horas en
el marco de una gran tensión,
con las familias
asomadas a los balcones,
protestando con banderas
y pancartas y muchos de
ellos explicando que pagaban
alquiler para vivir ahí.
Así,
bajo protesta no mostraban
ninguna disposición
a irse del edificio, mientras
continúan arribando
al lugar fuerzas policiales.
Para colmo el tránsito
comenzó a verse obstaculizado
a esa altura de Corrientes
al 4100.
Así
fue como, poco antes
de las 9, la jueza que ordenó
la medida decidió
suspender el desalojo
porque opinó que
“no estaban dadas
las garantías para
el operativo”; las
familias que ocupan el edificio
se habían resistido.
Está
de más decir que
la situación es fruto
del gran problema habitacional
que sufre en este momento
el país, y en especial
la Ciudad de Buenos Aires,
con alquileres inflados,
con pocas posibilidades
de créditos para
viviendas y sin una clara
política de intervención
estatal (nacional y porteño)
que brinde a sus ciudadanos
lo que dictamina la Constitución
capitalina: que remarca
que todos tenemos “derecho
a una vivienda digna”.
U.K.
Buenos Aires, 7 de mayo
de 2008