La
Guardia Urbana se especializa
Unos 800
agentes, de la ex Guardia
Urbana, ahora Control de
Tránsito y de Transporte,
se están especializando
para cumplir la función
de controlar el tránsito.
Según la vicejefe
de Gobierno, Gabriela Michetti,
“el foco de la misión
estará puesto en
el control y la prevención,
en concientizar a todos
los ciudadanos, evitar accidentes
y salvar vidas, haciendo
respetar el Código
de Tránsito”.
Ayer,
martes 29, en el Parque
de la Ciudad, presenció
el jefe de Gobierno porteño,
Mauricio Macri, junto con
la vice jefa de Gobierno,
Gabriela Michetti, y el
ministro de Justicia y Seguridad,
Guillermo Montenegro, una
clase práctica de
los nuevos agentes de Control
de Tránsito y de
Transporte que tendrán
a su cargo tareas específicas
para mejorar la seguridad
vial.
Los
funcionarios observaron
en el Parque de la Ciudad
una de las clases prácticas
con que están siendo
preparados desde hace un
mes los futuros agentes
de seguridad vial, ex integrantes
de la Guardia Urbana.
En
una conferencia de prensa
que ofreció junto
al Ministro de Justicia
y Seguridad, Guillermo Montenegro,
y al director General de
Seguridad Vial, Pablo Martínez
Carignano, Michetti enfatizó
que “el foco de la
misión estará
puesto en el control y la
prevención, en concientizar
a todos los ciudadanos,
evitar accidentes y salvar
vidas, haciendo respetar
el Código de Tránsito”.
Los
agentes en capacitación
tendrán como objetivo
concientizar a conductores
y peatones sobre los peligros
de no respetar las normas
de tránsito, labrar
actas de infracción
y realizar controles de
alcoholemia y toxicológico
a los conductores, fundamentalmente.
Según
dicen desde el gobierno
porteño “contarán
con la colaboración
de la Policía Federal
hasta que la ciudadanía
vaya aceptando su autoridad”.
Porque es verdad que la
Guardia Urbana no había
logrado demasiado respeto
en el vecino porteño.
También comentaron
que trabajarán ligados
a la Policía de la
Provincia de Buenos Aires
para evitar caso de fugas.
Serán
aproximadamente uno 800
agentes los que desplegará
el Gobierno porteño.
Su sueldo promedio es de
1148 pesos. Su tarea será
en los lugares de mayor
frecuencia de accidentes.
Sobre eso, Montenegro explicó
que, por ejemplo, en los
alrededores de los boliches
se detectan los mayores
casos de exceso de alcohol
en sangre, en tanto que
un criterio similar se aplicará
estadísticamente
donde se produzcan otra
clase de infracciones.
Montenegro
señaló que
el principal problema de
la Guardia Urbana fue haber
salido a la calle “sin
tener en claro qué
servicio iba a dar. Ahora
es diferente, saben que
esperamos mucho de ellos,
que tienen una función
irremplazable y saben para
qué están”,
añadió.
U.K.
Buenos Aires, 30 de enero
de 2008