Reinauguran la esquina Santos Discépolo

A 110 años de su nacimiento, el poeta tanguero y vecino de Balvanera fue homenajeado con la colocación de una placa y una pintura en su honor en Corrientes al 1800. 
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El pasaje, legendario para la ciudad porque fue por ahí donde circuló el primer  tren, hoy lleva el nombre del autor de “Cambalache”. En la esquina Corrientes en los últimos años se construyeron varios edificios que modificaron el paisaje de la zona que delimita a Balvanera del centro porteño.

En este cambio de fisonomía, uno de los edificios levantados fue el de una obra social. Según contaban en la presentación algunos referentes, sobre el mismo se colocaron hace varios años placas en recuerdo de Discepolín.

Con las reformas edilicias estas fueron cambiadas por una pequeña pieza chapa con un filete que indicaba que esa era la “esquina Santos Discépolo”.

Luego del acto de ayer, al lado del 1841 de Corrientes se colocó una gran placa donde dejan asentada la “reinauguración de la esquina Enrique Santos Discpeólo”. “A 110 años del natalicio de este gran poeta y compositor del tango”, reza el bronce, que lleva la firma de la Asociación Amigos de la Avenida Corrientes y está fechada con el 27 de marzo de 2011.

Al acto asistieron, entre otros, el maestro Atilio Stampone (presidente de la Sociedad Argentina de Autores y Compositores) y los hijos de personalidades del tango como Virgilio Expósito, Francisco Canaro, Mariano Mores y Osvaldo Pugliese. Entonaron canciones del autor Rodolfo Lemos, Lucrecia Mérico y Susana Mir.

Además, por encima de la placa conmemorativa, se decidió colocar una pintura mural inspirada en uno de sus hitos del dos por cuatro: “Cambalache”.  Un pensativo Discepolo mira con profundidad mientras toma café junto a una Biblia y un calefón, en alusión a un pasaje célebre de aquel tango que lo llevó al reconocimiento.

Enrique Santos Discépolo fue vecino de Balvanera desde su nacimiento en 1901. "Chorra", "Malevaje", "Esta noche me emborracho", "Uno", “Soy un arlequín”, "Yira-yira" son solo algunos de sus textos más cantados en la historia de la melodía ciudadana.

Tambíen fue actor, dramaturgo y cineasta. La película “El hincha” fue su última pieza cinematográfica y la vez la más recordada, ya que encarnó a un fanático del fútbol. Discepolín falleció el 23 de diciembre de 1951.          

J.M.C.

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