Reabrieron
el club de ajedrez Torre
Blanca
Después de once meses
de clausura el Club Torre
Blanca volvió a abrir
sus puertas a sus socios.
Así el más
importante club de ajedrez,
situado en pleno Abasto,
volvió a abrir sus
puertas pese a algunos pronósticos,
a los que jamás nos
sumamos, indicaban todo
lo contrario.
Fueron
once largos meses en los
que los socios se reunieron
en la remodelada plaza Almagro
para disputar sus tradicionales
partidas como antes de la
fundación del club
en la década del
’70. También
participaron del Plan Único
de Deportes de la Dirección
de Deportes que se realiza
en esa misma plaza y los
más pequeños
participaron de los Juegos
Evita y en el Programa Juanito
Laguna al no poder concurrir
a su club.
Sus dirigentes se movilizaron
en la larga burocracia para
hacer entender a funcionarios
municipales que ese club
era un lugar de contención
social y educativo. Su presidente
Juan Ángel Mas, acompañado
de su vicepresidente y fundador
del Club, nunca bajó
los brazos.
En un intervalo de las 63
partidas que se disputaron,
el presidente Mas, muy emocionado,
agradeció a todos
los socios que creyeron
en el club y siguieron aportando
sus cuotas sociales mientras
estaba cerrado. Agradeció
profundamente al director
general de Promoción
de Actividades Deportivas,
Víctor Lupo, que
desde el primer día
“nos acompañó
junto a todo su equipo,
lo mismo que a la Red de
Clubes de la cual formamos
parte, por abrirnos las
puertas de sus clubes de
barrio”
Ante la presencia del doble
campeón argentino,
Ariel Sorín; el gran
maestro, Pablo Lafuente,
y los cuatro maestros del
club, Damián Lemos,
Lucas Liascovich, Cristian
Goldwaser y Alan Pichot,
el árbitro internacional
Adrián Roldan expresó:
“Este club, que dio
muchísimos campeones
nacionales y algunos mundiales
como Pablo Zarnicki, no
podía cerrar, no
podía ser como la
película Luna de
Avellaneda y el esfuerzo
de su presidente y de todos
los que queremos de verdad
al club, lo reabrimos con
más fuerza que antes”.
Desde la revista El
Abasto les deseamos
mucha suerte por este último
enroque.
U.K.
Buenos Aires, lunes 3 de
diciembre de 2007