Alta posicionamiento en buscadores y directorios Abasto

            

Agregar a Favoritos | Buscar | Preguntas | Mapa del sitio | Contactar |

INICIO HEMEROTECA CARTELERA LINKS CONTACTO BUSCAR

 

             

 

 



notas recientes

28/09/06 Vuelto exacto o redondeo a favor del cliente

28/09/06 Obras en el Parque Sarmiento

28/09/06 Cyber-hogar para chicos en situación calle

26/09/06 Candidato a jefe de gobierno (¿por K?) : Telerman

26/09/06 Candidato a jefe de gobierno (¿por K?): Scioli

25/09/06 Ley de ley sobre la educación sexual

21/09/06 Etchecolatz: condenado por genicida

21/09/06 El día de la primavera se liberan libros

19/09/06 Remodelación de un Pabellón del Hospital Borda

14/09/06 La Copa Davis

14/09/06 Ciclos de la vida

14/09/06 El Centenario como nuevo

11/09/06 Instituciones y vecinos de Boedo logran una plaza

11/09/06 Reconstrucción de la Estación Once de Septiembre

11/09/06 Terrorismo de estado: genocidas argentinos ya no dormirán tranquilos

05/09/06 Piden estatizar el Hospital Francés

05/09/06 Y se vienen los contendores

04/09/06 Demolerán la ex cárcel de Caseros

04/09/06 Mundial de Tango

31/08/06 La objetividad periodística

31/08/06 Campaña de vacunación para el control de Rubéola

31/08/06 Carrera para minas saludables

29/08/06 ¡Tierra y libertad!

26/08/06 ¡Basta de torres!

26/08/06 Proyecto: documental sobre el Abasto

26/08/06 La Placita del Mientras Tanto

22/08/06 Nos vamos poniendo tecno

22/08/06 Emergencia ambiental de la cuenca Matanza-Riachuelo

18/08/06 Metodología de la derecha


 

Reportaje a un ex-cura controvertido por asumirse como se siente...

Cura para la homosexualidad

Desde la altura del piso 16, la vista que se abre hacia el barrio del Abasto es atrayente y magnífica. El pequeño departamento de paredes blancas, despojado y luminoso, tiene reminiscencias de claustro. Allí vive Andrés Gioeni, seminarista, sacerdote y por último, actor y modelo gay.

P.C.: ¿Te benefició o te perjudicó escribir Lucifer, ángel y demonio?
A.G.: A partir del libro recibí constantemente cartas y correos-e de gente que se ha sentido identificada. El motivo principal que me impulsó a escribirlo fue que mi experiencia personal sirva para otros. La tradición judeocristiana ha considerado torpemente a la homosexualidad como un crimen y la ha penado con los castigos más atroces. Fui y soy testigo del sufrimiento y el dolor de muchos que tienen miedo de que sus familias, sus amigos y la sociedad los rechacen por su orientación sexual. Algunos de ellos han preferido el exilio y otros el suicidio. Me perjudicó solamente en que he sido discriminado en algunos castings para la TV, porque me consideran un personaje mediático. Yo soy conocido como “el cura gay”.

P.C.: ¿De tu vocación sacerdotal, te queda algo?
A.G.: Solamente la tendencia a “sermonear”, pero reconozco haber recibido una muy buena formación cultural en el seminario.

P.C.: ¿Hacia dónde orientaste tu vida?
A.G.: Hacia la publicidad y el teatro, estoy haciendo tres obras teatrales en “El vitral”: “Amigos íntimos” con textos de García Lorca, “Rock, horror y show” un musical extravagante, y “Cenicienta” para chicos. Me sacaron una nota para la revista gay Têtu, la más importante de Francia, y aquí me hicieron notas en Noticias, Seminario, Veintitrés y en el diario Clarín. Quiero encaminar mi vida en la actuación y transmitir valores existenciales a través de las obras de importantes dramaturgos.

P.C.: ¿Cómo asumís la homosexualidad?
A:G.: Estoy orgulloso de ser gay y no tengo miedo de decirlo. La sociedad tiene que abrir la mente y ver a la homosexualidad como una diversidad natural, parte de la complejidad de la sexualidad humana y forma no excluyente en este inconmensurable océano que es la creatividad del amor. Por eso creo que existe cura para la homosexualidad y consiste sencillamente en animarse a ampliar la mente y el corazón.

Mientras desciendo del piso 16, tengo tiempo de sobra para la siguiente reflexión: repasando aceleradamente la historia tenemos que reconocer que ha variado -y mucho- el concepto prejuicioso sobre la homosexualidad. Desde "pecado aberrante", que merecía la hoguera en el siglo V; pasando por "enfermedad vergonzosa" que debía ocultarse en el siglo XX; a este despectivo "puto de mierda" del siglo XXI, los logros resultan optimistas. Paciencia y a esperar, que aquí todo llega con retraso.

P.C.


Revista El Abasto n° 51, noviembre 2003.


 
 


 

 

 

 

Mercado de Abasto Proveedor
Barrio de tango
Carlos Gardel desde el Abasto
Campeones; boxeo en el Abasto

Luca Prodan, el pelado del Abasto

II Concurso Literario, Pecados Capitales

 

 

Copyright www.revistaelabasto.com.ar - Mientras mencione la fuente permitimos su reproducción,