Entrevistamos
a Adriana Klein, una dueña
del Hotel Abasto Plaza.
Crece
el turismo cinco estrellas
¿Querés contar
cómo les fue al principio
con el hotel y cómo les
está yendo?
“El hotel lo abrimos en
el 2000 inaugurando con dos
cuestiones sumamente originales:
primero el emplazamiento de
un hotel de esta magnitud en
un barrio como el Abasto, que
no formaba parte de los circuitos
tradicionales para este tipo
de turismo. Y lo segundo fue
que inauguramos un hotel temático
de tango cinco estrellas con
servicio internacional.
Estos dos factores al principio
nos jugaban en contra, además
el cambio de uno a uno no favorecía
el turismo a la Argentina; la
industria turística estaba
muy paralizada. Esta industria
ha comenzado a funcionar acorde
con la necesidad y las ganas
del turismo externo de conocer
el tango y la cultura latinomericana.
Hoy estamos más que conformes
porque realmente la pegamos
con la visión que tuvimos,
y la inversión de capitales
privados argentinos y muchísimo
esfuerzo hoy están dando
sus frutos. Digamos que es un
momento de éxito y apogeo
pero sabemos que hay que continuar
con el trabajo, porque esto
apenas empieza y como todo proyecto
de país no es una acción
de una año a otro sino
un cuidado a largo plazo. Y
acá aprovecho a hacer
un llamado de atención
al oportunismo, característica
tan nuestra, tan argentina,
donde se piensa "ahora
funciona el turismo, hagamos
rápidamente milongas,
escuelas de tango, cena-shows,
etcétera". Ésa
no puede ser la actitud, porque
hay que hacerlo con cuidado,
profesionalmente para poder
atender a un público
que sabe lo que se puede exigir.
Nosotros atendemos un público
internacional, muchos europeos
y orientales que están
con una cultura muy exigente
y debemos responderles acorde
con sus expectativas.
¿Podrías
comentar tu opinión sobre
Cultura Abasto?
Cultura Abasto es un organización
que une y reúne a todos
las expresiones culturales que
ya existen en este barrio, como
el movimiento más importante
de teatros independientes en
el país, las visitas
que se pueden hacer a muy prestigiosos
artistas plásticos, las
intervenciones urbanas que hay
en los trabajos de Marino Santa
María o los frentes fileteados,
o la posibilidad de visitar
un lugar histórico como
el Museo Casa Carlos Gardel
y todos los emplazamientos de
lugares históricos e
hitos del tango. Tenemos que
trabajar para la toma de conciencia
de respetar y de conservar,
características que pareciera
que no tenemos. Como Cultura
Abasto nuestra misión
es que se tome conciencia de
lo que tenemos como para poder
cuidarlo y a su vez presentarlo
al mundo de la manera más
estética, cuidada, modificando
lo que haya que modificar sin
perder la esencia cultural.
Es una proyección riquísima
turísiticamente hablando.
Que el turismo venga a visitar
los fileteados, los murales,
el Mercado aunque hoy conserve
solo la fachada y sea un shopping,
producciones fotográficas
históricas, el Museo
Carlos Gardel. Creo que hay
un potencial gigantesco y estamos
ante una explosión turística.
A su vez los teatros, los lugares
de tango como Almatango o la
esquina Carlos Gardel. En el
barrio hay un amplio espectro
para muchos tipos de turismo,
no solamente para el que puede
consumir cinco estrellas.
Hoy hay dos momentos muy especiales
en el año donde el barrio
del Abasto se involucra mundialmente
que son el Festival de Tango
y el Campeonato Mundial de Tango.
En el hotel alojamos a semifinalistas
del Campeonato Mundial de Tango
y acá tienen sus clínicas
donde practican. Además
están los contingentes
de japoneses que vienen a ver
el Mundial y también
toman clínicas de tango.
¿Considerás
que este progreso puede tener
algo negativo?
La demolición de nuestro
propio patrimonio histórico...
Tenemos que conocer el valor
histórico de cada baldosa.
Hoy el bar O´Rondeman
es lo que más nos duele,
no lo pudimos defender. Es bueno
que hayan acciones privadas,
pero que no destruya la cultura
del lugar.
R.S.
Revista El Abasto,
n° 74, marzo 2006.
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