El nombre se puede elegir
FOTO: argentina.indymedia.org
El Gobierno de la Ciudad
estableció una resolución
donde a partir de ahora
se tendrá que atender
en los hospitales porteños
a los travestis por su nombre
femenino con la intención
de erradicar la discriminación
que atraviesan a la hora
de concurrir a los nosocomios.
Travestis,
transexuales y transgéneros
que concurran a los hospitales
de la red pública
porteña podrán
exigir ser atendidos con
el nombre femenino o el
que eligieron por su identidad
de género y no con
la denominación que
figura en los DNI,
según establece una
resolución difundida
por el Gobierno de la Ciudad
que propone esta medida
para erradicar las situaciones
de discriminación
que vivían las personas
que optaron por el cambio
de sexo a la hora de concurrir
a los hospitales.
Según
ADN, la medida fue bien
recibida por las organizaciones
de travestis, transexuales
y transgénero, aunque
admitieron que, ahora el
trabajo deberá centrarse
en la capacitación
a médicos, enfermeros
y empleados administrativos
para que la iniciativa pueda
cumplir el objetivo para
el cual fue elaborada.
La
propuesta -que firmó
el ministro de Salud porteño,
Alberto De Micheli, está
basada en la Constitución
de la Ciudad y en tratados
internacionales- permitirá
que cualquier persona que
concurra a atenderse elija
el nombre por el que desee
ser llamada para las distintas
prestaciones.
Valeria
Paván, coordinadora
del área de Salud
de la Comunidad Homosexual
Argentina, explicó
según ADN, que “muchas
veces las travestis que
se atienden en los hospitales
son maltratadas, mal atendidas
o, a veces, ni siquiera
atendidas por discriminación
tanto de los pacientes como
de la institución
misma”. Si
bien Paván remarcó
que esta situación
no se vive en todos los
centros de salud, la dirigente
señaló que
“como están
tan pasadas de agresión
y maltrato, les agarra inhibición
y prefieren estar enfermas
en su casa”.
En
el mismo medio, ADN, dan
voz a Martín
Engelman, becario
del CONICET y miembro de
la asociación civil
Gondolín, cuyo trabajo
se centra en la lucha por
los derechos de la comunidad
trans, considera que si
bien “gracias a esta
resolución, las chicas
van a poder ser nombradas
con nombre de mujer”,
aún resta superar
algunos obstáculos,
como por ejemplo, “que
sean internadas en sectores
femeninos y no en salas
de varones”. Para
Engelman, “está
muy bien que en el campo
sanitario se empiece a reconocer
los derechos trans”
pero remarcó que
“lo fundamental
es ir por la lucha del cambio
registral”.
Este pedido alude a que
los travestis, transexuales
o transgénero puedan
modificar su nombre en sus
DNI: “El cambio registral
permitirá que puedan
acceder a otros trabajos
que nos sea el sexual ya
que el 93% de la población
travesti trabaja en la calle”,
destacó Engelman.
U.K.
Buenos Aires,
6 de noviembre de 2007