Una cuestión
de sentido común
Julio de 2007, 19 horas
de un día helado
–luego de la insólita
nevada- y que parece confirmar
los catastróficos
pronósticos sobre
el cambio climático,
hechos por 2500 científicos
de 130 países, en
París.
Yo
me encuentro en un placentero
lugar con calefacción,
tomando café y observando
a través de la amplia
vidriera la avenida Corrientes
en su incesante circulación,
en este mi entrañable
barrio del Abasto, pensativo
y meditabundo en las incógnitas
existenciales que son muchas,
inexplicables y confusas.
De pronto se me ocurrió
que desde esa confortable
posición podría
hacer periodismo de investigación
sin riesgo alguno y aportar
un dato hasta ahora ignorado
(creo). Comencé por
constatar cuánto
tiempo dura la luz verde
del semáforo, un
minuto aproximadamente;
después verificar
cuántos taxis pasan
durante ese minuto, pasaron
25 y en 10 minutos contabilicé
178; lo que hace un total
de 1.068 en una hora y no
seguí calculando
porque llegaría a
una cifra desmesurada.
Usted,
amigo lector, se estará
preguntando: ¿y para
qué esta estadística
y qué aporta? La
respuesta es: para tomar
conciencia de la realidad
y obrar en consecuencia
utilizando el sentido común.
Mi conclusión final:
creo que hay una cantidad
excesiva de taxis y no todos
pueden trabajar, y también
creo que en lugar de aumentar
la tarifa, como proyectan
volver a hacer, lo lógico
sería rebajarla así
trabajarían más
y pudiéramos permitirnos
el “lujo” de
viajar en taxi todos, incluso
los jubilados. ¿Es
mucho pedir?
P.C.
Bs. As. 13-7-2007