Y
vuelven las fotomultas…
El jefe de Gobierno
porteño, Mauricio
Macri, admitió que
las fotomultas "no
son la solución"
para reordenar las calles,
pero que la medida anunciada
es parte de en "una
guerra" contra el caudal
de autos en la Capital.
Él mismo las había
desafectado hace unos meses.
Se
reabrió la polémica
ya que el actual jefe de
Gobierno porteño
reconoció que para
su instrumentación
debió recurrir al
"viejo contrato"
que su misma administración
había "suspendido"
en diciembre por estar vencido.
El mismo Macri admitió
que las fotomultas "no
son la solución"
para reordenar el tránsito,
pero justificó la
medida anunciada ayer al
enmarcarla en "una
guerra" contra
el caudal de autos en la
Capital, según declaraciones
realizadas en Radio
10. Y amenazó
que "si no
funcionan, iremos a cosas
peores" en
alusión a las medidas
implementadas en otras ciudades
del mundo donde hay restricción
en la circulación
por número de patentes.
Por
otro lado, el ex jefe de
Gobierno porteño
y actual legislador por
el bloque Diálogo
por Buenos Aires,
Aníbal Ibarra,
advirtió en la misma
radio que las fotomultas
“no sirven”
para mejorar el tránsito
porque hay “un
interés contrapuesto”
en el sistema; explicando
que “el estado
quiere que haya menos infracciones,
mientras las empresas quieren
que haya más para
cobrar”.
Y criticando a Macri agregó:
“encima no va a licitar”.
Y desde su propia experiencia
como primer mandatario porteño
explicó: “he
convivido bastante con el
sistema de fotomultas instalado
por De la Rúa, como
una herramienta para ordenar
el tránsito. Después
de varios años de
convivir y pelear con el
sistema puedo decir que
está diseñado
solamente para favorecer
a las empresas que concesionan
el servicio y no sirve como
herramienta de control y
prevención”.
U.K.
Buenos Aires, 6 de junio
de 2008.