Entrevista a un joven pintor,
Rodrigo García Anganuzzi,
que está exhibiendo su obra en el
barrio
“Pinto para concientizar,
conmover, comunicar y
por sobre todo porque me gusta”
“La vida continúa”
es un centro de jubilados y pensionados
que funciona en Gallo 333 y que con la dinámica
dirección de su presidente, Pascual
(Paco) Mazzaferri, desarrolla múltiples
actividades: folklore, yoga, gimnasia, turismo,
ajedrez, canasta, exposiciones de pintura,
entre otras manifestaciones.
Es precisamente la muestra
de un joven pintor, Rodrigo García
Anganuzzi, que se exhibe en el local lo
que me motivó esta entrevista para
saber más del autor y su obra.
¿Desde cuándo
estás con la pintura?
“La primera vez que tomé
conciencia de la pintura fue a los 11 años
en la escuela primaria, una escuela pública
y museo de arte en 7° grado. La escuela
cuenta con las obras de artistas reconocidos
de la talla de Berni, Quinquela Martín
y Lacámera, entre otros. Allí
pinté un cuadro al óleo y
después dejé la parte artística
hasta los 15 años en que la retomé
en Mendoza, en la casa de mi tío
que es artista plástico. Cuando volví
a Capital decidí cambiar de escuela
y entonces ingresé a la Fernando
Fader. Retomé los estudios plásticos;
terminado el secundario empecé el
profesorado en Arte, hasta obtener el título
de Profesor Nacional de Bellas Artes y allí
perdí mi creatividad… (Risas)”.
¿Cuántas
exposiciones realizadas?
“Alrededor de veinte, contando festivales,
concursos y ferias culturales”.
¿Premios?
“Premio Municipal de Collage en la
temática “Derechos Humanos”.
Yo no participo en concursos o salones nacionales
porque los ganadores están elegidos
de antemano, son los consagrados que buscan
reconocimiento y por otro lado el jurado
le otorga premios a ellos como una forma
de comprar barato su obra”.
¿Qué
es lo que te motiva pintar?
“Mi objetivo no es pintar para ganar
nada, pinto para concientizar, conmover,
comunicar y por sobre todo porque me gusta.
Educando de alguna forma la observación
estética de uno y de los otros, aunque
lo que yo busque genere una crítica
negativa, la prefiero antes que la indiferencia
del silencio.
”Recomiendo esta exposición
donde se destaca en toda su expresividad
a la figura humana y el movimiento coreográfico
y armonioso del cuerpo femenino”.
En la misma sala se exhiben
obras de muy distinto estilo y elaboración
pero de una interesante fuerza cromática.
No aporto más porque me fue imposible
conseguir datos del autor/a. A propósito:
¡cuánto ayudaría a los
concurrentes un simple folleto con los datos
esenciales de los participantes!
P.C.