Rousseau Fraga
Rosendo Fraga publicó
al minuto de la muerte de Néstor
Kirchner en La Nación digital quizás
la peor nota de todas las que se escribieron
en esta danza de letras póstumas
para Néstor Kirchner, donde instaba
a la esposa del fallecido ex presidente
y malogrado futuro candidato, y presidenta
del país, a aprovechar la hermosa
ocasión de su fallecimiento y la
oportunidad de la situación de su
muerte (quizás no sea raro que un
oportunista aconseje aprovechar la oportunidad,
aprovechando la oportunidad) para cambiar
el rumbo de “las terribles políticas”
del ahora muerto, ahora que ya estaba muerto
Rocinante
Fraga, amigo de los Sancho Panza
Esa nota escrita un exacto
minuto después del fallecimiento
de Néstor Kirchner, con una precisión
de cirujano y una frialdad de nueve de área,
da a pensar que cuando se enteró
de la noticia no era ya Rosendo Fraga sino
Rozagante Fraga. Aunque en su cabeza quizás
creía seguir luchando contra los
molinos de viento del kirchnerismo, y entonces
era Rocinante Fraga. Y si creía que
con la oportunidad y velocidad de la nota
estaba forjando algo, Rosendo Fragua, o
Rocinante Fragua, amigo de los Sancho Panza.
Aunque minutos antes de la muerte de Néstor
Kirchner a juzgar por sus textos anteriores,
escritos en un medio que es dueño
de la provisión de materias primas
con una papelera comprada en situaciones
confusas de la mano de los militares y que
es materia de causas judiciales, era Rosendo
Traba. Por ser benévolo y no decirle,
como le dijeron en algunas lados, Rosendo
Gaga, como una especie de Lady Gaga de los
medios foráneos. O aun peor, Rosendo
Dada, reeditor en la desubicación
e inoportunidad de sus notas, del movimiento
dadaísta (con perdón del movimiento)
no para el lado en que iba al surrealismo
sino para el lado que se empezaba a acercar
a la estética nacionalsocialista
alemana…
Alejandro Miguel
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Revista El Abasto, n° 126 , noviembre
2010.