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Loca como tu madre
La actriz Mónica Cabrera -¿podemos
citarla como especialista en realizar sus
propios unipersonales, a estas alturas?- sigue
en cartel con su creación Dolly
Guzmán no está loca.
En esta ocasión,
nos topamos con una mujer que por no poder
cubrir con su obra social los gastos que ocasionaba
su tratamiento psiquiátrico en el manicomio
del maléfico Dr. Mnemo termina huyendo
de este lugar. Decide escapar porque Mnemo
toma su cabeza, la de Dolly, como falta de
pago. Éste es el punto de partida del
espectáculo.
Cabrera apela, casi
permanentemente, a una enorme pantalla, la
que da comienzo al espectáculo mismo,
como si estuviéramos ante una película
o un programa de tele; y es en esta pantalla
donde vemos desfilar al personaje de Dolly,
transitando por distintos puntos de la ciudad,
mientras se suceden los títulos.
Dolly Guzmán
es una pobre mujer, un ama de casa con aires
de estrella… Pero, claro, todo está
tocado en tono de humor. Lleva consigo una
valija enorme, por momentos, en las que carga,
además, de unas pistolas para defenderse
del Dr. Mnemo y una enorme y vasta cantidad
de pastillas para -intuimos- su salud mental.
A través de
este recurso de la enorme pantalla aparecen
otros personajes en la historia, algunos son
interpretados por la misma Cabrera y otros
por diferentes actores. Pero este sencillo
recurso le otorga el espectáculo un
dinamismo y una lógica circular que
potencia la narrativa con la que fue concebida
esta producción.
Mónica Cabrera
si en algo no ha escatimado, para esta obra,
fue en la presencia de efectos distintos,
los que van desde un ataúd que se desliza
solo y del que escapa el personaje central;
hasta luces; disparos, etcétera…
apelando, incluso, en algunas ocasiones a
ciertos elementos narrativos propios de algunos
géneros cinematográficos, como
sucede en ciertos tramos de su persecución;
y hasta televisivos; cuando recrea cierto
códigos típicos de la televisión
amarillista de los talks shows más
berretas.
No puedo dejar de
mencionar todos los elementos a los que apela
la creadora de esta obra, algo que aparece
en más de una ocasión, y esto
es la música, ya que más de
una vez el personaje central se pone a desgranar
distintas canciones. Otorgándole así
a este inusual unipersonal un elemento que
lo torna aún más atractivo.
Para pasar un momento más
que agradable, vaya sin dudarlo.
Marcelo Saltal
[email protected]
FICHA TÉCNICA: Obra: Dolly
Guzmán no está loca.
Autor: Mónica Cabrera. Elenco: Mónica
Cabrera Dirección: Mónica Cabrera.
Sala: La Carpintería Teatro, Jean Jaurès
858, tel.: 4961-5092.
Revista El Abasto, n° 131 , mayo 2011.
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