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Reflexión
barrial sobre las Comunas
El gobierno, a la vuelta
de la esquina
“El futuro se acerca
/despacio / pero viene”. Este poema
de Mario Benedetti bien podría hacer
mención a la historia de las Comunas.
Tan mencionadas este último tiempo.
Esta es una historia que lleva tiempo escribiéndose
y este 10 de julio los porteños veremos
concretarse.
Comenzó hace más
de diez años y remite a los cimientos
mismos de organización porteña,
tal como la conocemos en la actualidad. La
Constitución de la Ciudad de Buenos
Aires fue sancionada el 1 de octubre de 1996
e instituyó a las Comunas como “unidades
de gestión política y administrativa
con competencia territorial”.
Este planteo a favor de
una nueva forma de gobierno, más cerca
de los vecinos, obtuvo su promulgación
diez años más tarde. El 4 de
octubre de 2005 se sancionó la Ley
Orgánica de Comunas, Nº 1.777.
Su artículo segundo establece que éstas
son “unidades de gestión política
y administrativa descentralizada con competencia
territorial, patrimonio y personería
jurídica propia”.
También se
fijó la fecha para dividir a Buenos
Aires en 15 comunas: el 31
de mayo de 2007.
Como no se cumplió
en el tiempo estipulado, hubo movilizaciones
vecinales, que incluso llegaron a la Justicia
(buscar en www.elabastoweb.com.ar: “Las
comunas por justicia”). En este
marco, la Legislatura fijó en octubre
de 2009 la fecha de la primera elección
comunal: 5 de junio de 2011.
La Legislatura la unificó
junto al los comicios para jefe de Gobierno
el 10 de julio de 2011. A su vez, el parlamento
dio el retoque final y estableció que
en las dos primeras elecciones comunales se
utilice boleta única, incluyendo cargos
gubernamentales y comuneros.
A su vez, la Ley establece
que los primeros dos años el presupuesto
asignado a las comunas no superará
el 5% del total establecido para la ciudad.
Se puede concluir, entonces, que durante este
tiempo de arraigo en la sociedad no se verán
grandes obras en los barrios.
“Un pequeño
Estado que tiene que responder a los vecinos”,
así nos definió a las Comunas
el legislador por Nuevo Encuentro, Gonzalo
Ruanova. Reconoció también que
“desde el 2001 el gobierno está
esta deuda con la ciudadanía”.
Sin embargo, alienta a que “cuando el
vecino vaya a su comuna tiene que tener una
solución”.
Lo
dice en la ley
En la Constitución de la Ciudad de
Buenos Aires, el Título VI, en su artículo
128, establece: “Las comunas ejercen
funciones de planificación, ejecución
y control dan forma exclusiva o concurrente
con el Gobierno de la cuidad, respecto a las
materias de su competencia”.
En este sentido, la Ley
Orgánica fija que las 15 comunas porteñas
tienen Competencias originarias y concurrentes.
Las originarias son competencias
exclusivas, explicadas en el artículo
10 del a Ley Orgánica. Allí
se nombran “la planificación,
ejecución y control de los trabajos
de mantenimiento urbano de vías secundarias
y otras de menor jerarquía (Según
el Código de Planeamiento Urbano, las
avenidas de mano única, doble y pares
de calles de distribución; pero hay
dudas sobre este punto). También están
incluidos los espacios verdes (aunque no está
claro sí se cuentan los parques)”.
Además, la ley establece
“la elaboración participativa
de su programa de acción y anteproyecto
de presupuesto anual, su ejecución
y la administración de su patrimonio”
y la iniciativa legislativa y la presentación
de proyecto de decretos al Poder Ejecutivo”.
Por otra parte, el artículo
11 expone las Competencias concurrentes. Estas
implican que las Comunas y el Gobierno de
la ciudad deben acordar tareas de control
y contrataciones. El responsable de esta articulación
es el Consejo de Coordinación Intercomunal
(creado por la Ley 1.777, Título V).
Los puntos del artículo
señalan “la participación
en la planificación, prestación
y control de los servicios… la decisión,
contratación y ejecución de
obras públicas, proyecto y planes de
impacto comunal, así como la implantación
del programas locales de rehabilitación
y desarrollo urbano”.
El último punto llama
a implementar acciones de “promoción,
asistencia y asesoramiento a entidades vecinales
no gubernamental, sociedades de fomento, asociaciones
cooperadoras, de consumidores y usuarios,
clubes barriales y otras asociaciones civiles
sin fines de lucro que actúen en el
ámbito de la comuna”.
Quiero
participar
Con la llegada de las Comunas, comenzará
a funcionar un nuevo mecanismo donde la voz
del vecino estará más cerca
del oído del jefe de Gobierno. O por
lo menos es la idea. Tal como realizaron organizaciones
barriales de forma independiente a mediados
de 2009 (“Comuna
3: formando un consejo consultivo”),
se configuraron los Preconsejos Consultivos
Comunales. Luego, fue el Gobierno el que los
convocó, lo que valió críticas
de varios sectores porque “desconoce
la labor previa”.
De todos modos, los encuentros
oficiales se realizaron desde 2010 en distintos
espacios educativos y culturales de cada comuna.
“Mucha gente participó de estos
encuentros quincenales convocados por el gobierno
donde se empezó a trabajar cómo
se trabajará luego de las elecciones
comunales”, manifestó a este
medio Eduardo Macchiavelli, titular la Subsecretaría
de Atención Ciudadana.
Entonces, ahora cualquier habitante de la
ciudad que tenga una iniciativa podrá
presentarla en los Consejos Consultivos
Comunales. Éstos se integran
con representantes de ONG´s junto a
vecinos independientes. Otras funciones de
este órgano son la de controlar la
ejecución del presupuesto y definir
prioridades, evaluar la gestión comunal
y promover políticas de participación
vecinal y de acceso a la información.
De ahí, es la Junta
Comunal la que entra en escena. Consta
de seis integrantes y un presidente. Estos
miembros serán los elegidos en julio
y asumirán en diciembre. Su función
es aprobar y ejecutar el presupuesto. Otras
tareas asignadas son la de nombrar y renovar
personal, antever la prestación de
servicio, administrar el patrimonio de la
comuna y enviar anteproyecto de ley y de decreto
a la Legislatura y al Poder Ejecutivo porteño.
La instancia superior es
el Consejo de Coordinación
Intercomunal, el cual estará
integrado por el jefe de Gobierno junto a
los 15 presidentes de las comunas. Su función
es acordar el contenido de las jurisdicciones
comunales dentro del proyecto de presupuesto
de la ciudad, definir los contenidos generales
de la planificación de inversiones
y mediar asuntos referidos a competencias
superpuestas entre Comunas.
Partidos
vecinales
Tal como difundimos en nuestro sitio web,
las listas a jefes comunales corresponden,
en gran parte, a fuerzas políticas
mayoritarias. En esta elección participarán
el PRO, el Frente para la Victoria, Proyecto
Sur, Movimiento Avanzada Socialista, Juntos
Por La Ciudad, Movimiento De Integración
Y Desarrollo y Valores para mi País.
“Lamentablemente con
el tiempo no pudimos conseguir que se configuren
partidos vecinales”, admitió
Macchiavelli, quien de todas formas se mostró
optimista en que, una vez que la elección
comunal sea asimilada por los vecinos, comenzarán
a surgir fuerzas locales.
“La Ciudad de Buenos
Aires se debe su propio código electoral
para que se conformen partidos comunales.
A la entidad comunal hay que establecerla
de forma independiente a las de jefe de Gobierno”,
manifestó Ruanova.
Con una visión más
critica sobre este punto, la candidata a jefa
de Gobierno por el Frente de Izquierda, Myriam
Bregman, expuso que “el hecho de que
las boletas vayan pegadas el 10 de julio junto
a las autoridades legislativas elimina la
autonomía de las comunas”. “La
participación se hace virtual”,
sostuvo la abogada especializada en derechos
humanos.
Según el Gobierno
de la Ciudad, la Comuna 5
(Almagro-Boedo, dentro de las avenidas y calles:
Estado de Israel, Córdoba, Gallo, Sánchez
de Bustamante, Sánchez de Loria, Av.
La Plata y Ángel Gallardo) tiene 177.537
habitantes en una superficie de 6,7 kilómetros
cuadrados. En tanto, la Comuna 3
(Balvanera-San Cristóbal, dentro de
las avenidas y calles: Córdoba, Callao,
Entre Ríos, Garay, Sánchez de
Loria, Sánchez de Bustamante, Díaz
Vélez, Gallo) cuenta con 6,5 km2 para
191.572 porteños.
En esta zona, al igual que
en el resto de la ciudad el futuro ya llegó.
Las comunas son un hecho. Se vive este proceso
entre la expectativa, mezcla de incertidumbre
y ganas de tener un barrio mejor. Al igual
que el poema de Benedetti, el futuro “viene
con proyectos y bolsas de semillas / con ángeles
maltrechos / y fieles golondrinas”.
J.M.C.
RELACIONADO:
Candidatos
comuneros (3 y 5)
Candidatos
a legisladores
Revista El Abasto, n° 132 , junio 2011.
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