Sucesos radiofónicos de Balvanera

Frecuencias del más acá

A pocos días de celebrar el “Día de la Radiodifusión”, el 27 de agosto, a nivel local compartimos la apertura de Radio Semilla junto a los vecinos de Balvanera y San Cristóbal. Sus protagonistas nos cuentan sus orígenes y cómo es levantar una emisora comunitaria desde abajo.
    El frío gana las calles pero aún así el tenue sol hace tolerable la jornada. El portón azul de Estados Unidos 2957 está entreabierto. Unos pasos adentro y nos recibe el clima festivo que se vive.
    Estamos en la sede de la casa barrial Caminos Abiertos, que desde 2000 realiza juegos y actividades recreativas con los vecinos de la zona. Sobre los muros del amplio pasillo principal hay una muestra de fotos. Mientras la gente se acercaba a ver las imágenes seguimos nuestro camino y damos con el buffet. Un cafecito y un pedazo de torta amenizan las bajas temperaturas.
   Mientras continuamos el recorrido, nuestra mirada descubre un perchero donde se exhiben remeras xerografiadas en negro con el logo de la emisora: un transmisor cuya antena se eleva en forma de rama.

   Entre el ir y venir de vecinos, nos ponemos a dialogar con Andrea Zita y Ramiro Miranda Ramos, integrantes de Radio Semilla. Lo que primero atinan a decir es que están “alegres porque, si bien la emisora está al aire desde hace un tiempo”, recibir la visita de vecinos y organizaciones que se coparon con la jornada les da “muchas fuerzas y así afianzar esta iniciativa hecha por y para la gente de Balvanera y San Cristóbal”.
   Ramiro luego toma la palabra y rememora la génesis de este proyecto: “Iniciamos como Cine de Barrio, integrado por Caminos Abiertos, La Trifulca, La Oruga (que se disolvió), y dentro de ese espacio realizábamos charlas debate en distintas casas culturales de la zona”.
   Luego, a ese peregrinar por los barrios de la ciudad llegó la idea de levantar una radio. “Asistimos a un curso dictado por la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA), ahí nos enseñaron a construir un transmisor y una antena”, evoca Ramiro.
    “Con las herramientas listas, reunimos a un grupo de gente con la que veníamos trabajando y empezamos a evaluar cómo llevar adelante esta iniciativa”, cuenta Andrea como el origen de lo que hoy es Radio Semilla. “En un principio, hacer radio para nosotros fue apilar ladrillo sobre ladrillo para construir el estudio y la sala de operación”, añade.
   “Problemas técnicos hubo miles”, bromean, pero recuerdan ese momento de iniciar como un periodo donde se planteó el rumbo. “Queríamos hacer una radio alternativa, comunitaria y barrial”, señalan.
    Con los estudios en construcción, “algunos de nosotros hicimos cursos de operación y en la actualidad nos repartimos el trabajo en comisiones para llevar la emisora adelante”, detalla Andrea.
    “La apertura oficial la celebramos ahora, pero desde hace un tiempo empezamos a transmitir; en la actualidad se realizan cerca de diez programas, nuestro nuevo objetivo, en cuestión de contenidos y gente trabajando, es estar las 24 horas al aire”, sostiene Ramiro.
    Mientras expresan su alegría y ansiedad por el encuentro, sobre Estados Unidos los bombos de la murga Los Mamarrachos de Almagro toman el centro de atención y las miradas van al pasillo central. Como una procesión, los uniformes celestes y naranjas bailan por todo el lugar. La alegría de la murga contagia y las palmas se mezcla con el sonido del carnaval.
    Tras la despedida de Los Mamarrachos, Ramiro nos invita a conocer el estudio. Luego de ir hasta el fondo del pasillo, subimos por una escalera de cemento y llegamos al primer piso. Allí nos recibe el operado. Hay un programa al aire.

Con sigilo, nos metemos en el estudio a sacar algunas fotos. Los columnistas están concentrados, pero igual intentan posar. De fondo, hay una bandera verde con el logo de la emisora y la leyenda “Balvanera-San Cristóbal FM 106.5”.

   El festejo siguió hasta entrada la noche. Con bandas y reconocimientos a vecinos que colaboraron con la iniciativa. A paso lento, nos despedimos de Radio Semilla con un “hasta luego” porque, tal como dijeron sus hacedores, “esta es una emisora hecha por y para los vecinos de Balvanera y San Cristóbal”.

J.M.C.