Aquellas cantoras

Las recuerdo con emoción y nostalgia. Rosita Quiroga, Libertad Lamarque, Azucena Maizini, Ada Falcón, Mercedes Simone, Dorita Davis, Amanda Ledesma, Tita Merello y otras que escapan a mi memoria y que nos deleitaban en aquellos años en que todo era, no sé si mejor, pero más natural y sencillo en la vida.
Algunas con un estilo más arrabalero, pero siempre desde su condición femenina. Seleccionaban las letras compuestas por grandes poetas y cantaban los temas escritos para ellas. Cada tango desarrolla una historia de vida, clara comprensible y vigente, en cuartetas inspiradas y de gran lucidez. Por eso no acepto a las cantantes que me dicen:

“Por vos a mi mujer / la vida he destrozao / y es pan de mis dos hijos / todo el lujo que de he dao. / No puedo reaccionar / ni puedo comprender, / perdido en la tormenta / de tu voz que me embrujó... / La seda de tu piel que me estremece / y al latir florece, con mi perdición...”

La impresión que me queda es que todo resulta confuso y no me creo la historia que me cuentan. Con el tango pueden expresarse el varón con vigor y la mujer con delicadez y entonces ¿para qué esta manifestación de travestismo tanguero?

P.C.