El incendio en el local del Once que hace siete años y tres meses continúa la búsqueda para curar heridas imposibles de sanar..

Tercer juicio por Cromañón

Otra vez al banquillo por el incendio que dejó en Balvanera 194 jóvenes muertos. El empresario textil dueño del lugar y varios exfuncionarios porteños serán los acusados en este enjuiciamiento.
Este año viene movido desde la perspectiva judicial. Es así que están en la agenda tribunalicia el asesinato de Mariano Ferreyra, la represión del 19 y 20 de diciembre de 2001, las coimas en el Senado y la desaparición de Marita Verón, el cual ya inició el mes pasado.
A su vez, irán al banquillo acusados por el fatídico incendio ocurrido en el boliche República Cromañón, considerado la catástrofe con mayor cantidad de muertes evitables. Sucedió el 31 de diciembre de 2004. En esa madrugada murieron 194 jóvenes (uno de ellos luego suicidándose). También hubo decenas de heridos y gente con daños severos de salud.
Este hecho sucedido en Balvanera tuvo en su primer juicio a cargo del Tribunal Oral Criminal N° 24. En el banquillo estuvieron relevantes funcionarios pertenecientes a la Superintendencia de Bomberos de la Policía Federal. A su vez, estuvieron implicados empresarios de boliches, acusados de ser partícipes de un sistema de coimas para conseguir certificados contra incendio y así evitar clausuras.
Luego, en 2008 se encaró el segundo juicio, el más relevante por haber tenido a los integrantes de la banda Callejeros, la cual daba un recial aquel día –mientras se hacía cargo de la seguridad– cuando se incendió el boliche.
El enjuiciamiento se realizó en la misma sala del Palacio de Justicia donde se hizo el juicio a las Juntas Militares. Allí compartieron espacio común los familiares de las víctimas y los acusados. En un clima tenso, que incluyó luego corridas en los alrededores de Tribunales, se condenó por estrago doloso seguido de muerte, lesiones y cohecho al entonces gerenciador del boliche, Omar Chabán; a su mano derecha, Raúl Villareal, quien fue condenado por homicidio simple con dolo eventual. Aún así, los montos de las condenas no están definidos.
También se determinó allí que los integrantes de Callejeros fueron coorganizadores del show. A su vez, se condenó a los comisarios de la 7°, Carlos Díaz y Miguel Ángel Belay, acusados de recibir una coima que avaló el ingreso de más gente de lo permitido (la capacidad prevista para Cromañón era de 1.031 personas y dicen que entraron al menos 4.500 personas).
Con respecto al tercer juicio, el abogado querellante José Iglesias, quien también perdió un hijo aquella noche, explicó al sitio Noticias Urbanas que el empresario textil y dueño de la propiedad donde se estableció Cromañón, Rafael Levy, está imputado por estrago doloso seguido de muerte. A su vez aclaró que su procesamiento está firme, ya que se produjeron todas las medidas preparatorias.
Además del empresario, está acusado por homicidio culposo el exsecretario de Seguridad porteño, el ex-subsecretario de Seguridad, el ex-director general de Seguridad Privada y el ex-comisario de la Séptima al momento de la tragedia.

J.M.C.

Reabren Jean Jaurès, altura Cromañón
Luego del debate en torno a la clausura de la calle Mitre, entre Ecuador y Jean Jaurés, que se avivara con el choque ferroviario y la posterior evacuación de heridos, el gobierno de la ciudad inició las obras para abrir un trazado alternativo, tal como venían reclamando vecinos desde hace años.
El cenotafio, ubicado sobre la esquina de cara a Plaza Miserere, se determinó que quede tal cual está. Ese era el pedido de un grupo de padres, bajo la agrupación Cromañón Nunca Más. Con el lugar a salvo, hubo acuerdo entre todos los familiares y amigos de las víctimas.
En este sentido, sobre la llamada “plaza seca”, terreno ferroviario cedido para levantar un pasaje para que se dejen ofrendas (dentro de la cuadra) se tenderá la calle alternativa. Así, Mitre en este tramo hará una especie de curva que llevará a la salida de la estación Once, devolviendo movilidad a esta zona.
Según confirmó el ministro de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, las obras de adaptación tomarán unos días.

El 29 de diciembre de 2011 La Alameda, organización que lucha contra el trabajo esclavo y la trata de personas, y familiares de las víctimas del incendio en República Cromañón realizaron una denuncia penal y escrache contra el prostíbulo ubicado en Rivadavia 3007. Según denunció la organización, el local pertenece al empresario Levy, imputado por estrago doloso en la causa Cromañón.
Este local, que hoy resalta en la cuadra por estar casi siempre con las persianas bajas y con un patovica en la puerta en horas que abre, “según los vecinos de Once, abrió en 2006 y se llamó Peko's y Quatro Cat's” releva un artículo periodístico del diario Tiempo Argentino. “Luego de una denuncia de la defensora del Pueblo, Alicia Pierini, que se apoyó en el primer material filmado por La Alameda, fue clausurado en 2008. Para entonces, ya funcionaba como prostíbulo, incluso, con camas adentro. Ese año, la causa penal fue archivada por el juzgado de María Romilda Servini de Cubría”, añade la nota.
“El macrismo y la justicia contravencional porteña siguen manteniendo la falsa y fraudulenta habilitación como bar/café. Esa es la medida de fondo quitarle el camuflaje seudolegal y no esperar que pasen diez días y paguen una insignificante multa para volver a reabrir este comprobado tugurio de la explotación sexual, la trata de mujeres y la venta de estupefacientes”, denunció La Alameda en un artículo publicado en su sitio web el 16 de enero de este año.
Al cierre de esta edición, ya no estaba la faja de clausura: las puertas del “boliche” estaban abiertas de par en par. Justicia, por los chicos muertos y las mujeres sometidas, todavía no hay en Balvanera.