Panorama de la lucha por la educación pública

¿Qué pasa en las aulas?

Apenas los estudiantes ingresaban al nuevo ciclo lectivo, el Gobierno de la Ciudad anunció la “fusión” de cursos. La comunidad educativa está movilizada y denuncia el vaciamiento de la educación pública. Distintas miradas al presupuesto porteño y relevo de los establecimientos de la zona.
El año electivo comenzó con polémica, marchas y repudio. La novedad con la que se desayunó la comunidad educativa porteña fue la “fusión” —tal la palabra utilizada por las autoridades— de cursos en varias escuelas de la ciudad. En otras palabras, la Disposición DI-2012-15 DGEGE del 29 de Febrero de 2012 dispone el cierre de 144 grados de nivel primario, 52 cursos de media (comerciales y liceos) y 25 de escuelas técnicas, es decir, 221 cursos cerrados o 15 escuelas clausuradas, según denuncian docentes y familiares.
La viceministra de Educación, Ana Ravaglia, confirmó en su momento que la medida se iba a llevar adelante a través de la Dirección de Educación de Gestión Estatal. “En ningún caso se tocaron cursos de los Distritos Escolares 5, 19, 20 y 21 (sur de la ciudad), sino sobre todo en escuelas de la zona norte y centro, con secciones de cinco a ocho alumnos”, manifestó. La medida debía implementarse a principio de marzo, pero se pospuso.
El gobierno porteño, desde lo legal, está habilitado a llevar a cabo esta “fusión”, denunciada como achicamiento del a educación pública, a través del Decreto 1990/97, el cual fue implementado en la época de Fernando De la Rúa, pero que nunca antes fue utilizado.
Sin embargo, en un comunicado de UTE-CTERA se confirmó que los afectados son los “Distritos Escolares 2º, 3º, 6º, 7º, 8º, 9º, 10º, 12º, 15º y 18º”.

Qué pasa en el barrio
Esto significa que la Comuna 3 (Balvanera y San Cristóbal) y 5 (Almagro y Boedo) están afectadas por la medida. Con respecto a la 3, es atravesada por los Distritos Escolares 1 º, 2 º, 3 º y 6 º. En tanto, la 5 está atravesada por los D.E. 2 º,6 º,8 º y 8 º.
La Disposición, que consta de 9 hojas donde se dividen a los cursos en primario, secundario y terciario, fue difundida por varias organizaciones docentes y políticas, entre ellas El Machete, a través de la cual tuvimos acceso.
Allí están ordenados por D.E. los cursos que se fusionan y cómo quedarán este 1012. Entre las escuelas mencionadas de la zona damos con: Escuela de Jornada Simple Nº 15 D.E. 03 "Francisco Narciso de Laprida", en México 2383; Escuela de Comercio N° 02 D.E. 01 “Dr. Antonio Bermejo”, Riobamba 623; Liceo 7 Domingo Faustino Sarmiento, ubicado en Callao 450; Colegio Nº 5 Bartolomé Mitre, ubicado en Valentín Gómez 3163; Escuela Técnica Nº 26 D.E. 06 "Confederación Suiza”, ubicada en Jujuy 255; Escuela de Comercio Nº 25 D.E. 02 "Santiago de Liniers", Corrientes 4261; Escuela Técnica Alejandro Volta, Lavalle 1681; Escuela Técnica Nº 29 D.E. 06 "Reconquista de Buenos Aires”, Boedo 760; Escuela Florencio Balcarce, Acuña de Figueroa 651; entre otros.
Con una mirada barrial, La Asamblea de Docentes del D.E. 8 º difundió una infografía en la que estima lo invertido por el gobierno porteño en educación privada. Como resultado, en el distrito que abarca Parque Chacabuco, Caballito y Almagro hay 18 establecimientos que reciben sumas oscilantes entre $8.238.800 y $1.336.512; mientras que allí buscan cerrar 6 cursos en tres escuelas públicas.

Movilización de guardapolvo blanco
Y si de maestros hablamos, vale recordar la carpa montada frente la Jefatura de Gobierno en repudio a esta medida. También hubo marchas y paros. El acampe duró 20 días en los cuales se juntaron 50 mil firmas para reclamar la derogación de la medida al Ministerio de Educación, encabezado por Esteban Bullrich.
Es más, los supervisores de los 21 Distritos Escolares reclamaron al Poder Ejecutivo de la ciudad “la anulación de la disposición que establece el cierre de grados” y la “conformación de una comisión integrada por representantes de la docencia, de las familias, de los cooperadores, de los estudiantes (de escuelas secundarias), de los poderes Ejecutivo, Legislativo y las Comunas” para elaborar “propuestas para recuperar la matrícula en las escuelas donde se hubiere reducido y satisfacer la demanda de vacantes en los distritos del sur”, según releva Página/12.

Privados y públicos
A nivel general, la cuestión educativa ha sido una de las más criticadas a la actual gestión. Según el sitio Chequeado.com, “desde el 2008, primer año de gestión del macrismo, hasta el 2010 la ejecución se ubicó por debajo del 62 por ciento. Mientras que en el período 2003-2007, siempre superó el 65 por ciento (elaborado en base a datos del Ministerio de Hacienda de la Ciudad)”. De este modo, se refutó la frase del mandatario durante el discurso de asunción de su segundo mandato: “Hicimos una inversión record en infraestructura escolar”.
Sobre este aspecto, en el blog del periodista Fernando Renzi (sardinas del desierto) se analiza el proyecto de presupuesto 2012, arrojando la siguiente conclusión: “Si tomamos la evolución del Ministerio (de Educación) el promedio no es malo, pero no sucede lo mismo si diferenciamos el gasto vinculado a las transferencias a la educación privada del resto del Ministerio”.
“Es así que mientras el gasto en educación privada aumenta un 121,20 %, el resto de las erogaciones del Ministerio apenas alcanza al 84% de aumento, muy por debajo del promedio, lo que explica la constante disminución de la participación de la educación pública en el total del gasto. También lo explica la bajísima ejecución del presupuesto de infraestructura escolar, por supuesto”, continúa la argumentación.
Otro estudio advierte sobre el mismo punto. “Los alumnos de los cinco barrios más pobres recibirán casi un tercio menos que los de los cinco barrios más ricos”. Esta conclusión se desprende del análisis hecho por la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ). Allí se indagó el presupuesto educativo de 2012 bajo el nombre “Proyecto de Ley de Presupuesto 2012. Un análisis a la luz del derecho a la educación y del derecho a la igualdad”. De ahí surge que en el Presupuesto 2012 es de 501.225.345 pesos, es decir, que hay una “disminución respecto de la suma asignada en 2011”, superior a los 513 millones.

Y en eso llegó la Legislatura
En la Comisión de Educación del parlamento la oposición presentó un despacho de minoría repudiando la iniciativa de cerrar cursos. Al respecto, la legisladora por Buenos Aires para Todos, Laura García Tuñón, consideró que “el cierre de los 221 cursos no es integración como les gusta decir a los funcionarios del PRO, éste es un claro ajuste en la educación y es la aplicación de las políticas neoliberales que no pudieron implementar en los ´90”.
En tanto, la diputada Victoria Morales Gorleri, titular de la Comisión y miembro del bloque PRO, aseguró a Noticias Urbanas que “la medida tiene que ver con la defensa de la escuela pública” y precisó que “la relación pedagógica no es la más ideal” cuando existen cursos con menos de 15 alumnos.
Luego de posponer un mes el cierre efectivo de los 221 cursos, Bullrich hizo público el número exacto de cursos que serán “fusionados”: 96. Esto se determinó luego de mesas de diálogo con gremios docentes para repensar la iniciativa. Al cierre de esta edición aún no se sabe cuales repercutirán en nuestras comunas.
Sobre este punto, la legisladora María Ellena Naddeo, integrante de la Comisión de Educación de la Legislatura expresó ante este medio: “Fue una instancia de diálogo en la que el PRO tuvo que retroceder, eso es positivo, la movilización de la comunidad educativo rindió frutos”. “Vamos a seguir reclamando que no se cierre ningún curso, antes hay que esperar y generar medidas para amplia la matricula y luego ver los subsidios a la educación privada”, sumó.
Eso no es todo en la agenda del ministro. El matutino Página/12 añade que el ministro Bullrich deberá presentarse ante la Comisión de Educación el 10 de abril y allí deberá explicar a los diputados las razones de esta medida, repudiada por la comunidad educativa porteña.

Más allá de lo que decida el gobierno, lo cierto es que el cierre de cursos vuelve (porque esto no inicia con la “fusión”) a poner en debate la discusión de fondo acerca de qué modelo educativo queremos en la ciudad. Más aún en una zona donde tenemos antecedentes como el reclamo del Normal 7, Mariano Acosta, entre tantos otros establecimientos que se han movilizado por una mejor calidad educativa. Es más, la toma masiva de establecimientos de 2010 vuelve a nuestro presente en señal de que las cosas poco han cambiado. Ayer los estudiantes, hoy la comunidad educativa en su conjunto, pero el reclamo sigue siendo el mismo: educación pública digna para los porteños.

J.M.C.