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El lenguaje a flor de piel
El silencio se plantea como
el idioma de la desesperación. Cuando
ya no hay palabras, cuando la identidad
se diluyó en el último punto
y coma, llega un páramo callado de
señas, guiños y puchos prendidos
uno atrás del otro.
Así vive el protagonista de Persona,
el Sr. Vogler, cantante de karaoke interpretado
por Marcelo Saltal. La presencia de la enfermera
Alma (Paulo San Martín) y su hermana
“la Numis” (Sabrina San Martín)
durante la rehabilitación del cantor
mudo van desenmascarando, en primer lugar,
la vida del enigmático hombre de
bata carmesí. Luego, como una consecuencia
de esto, los deseos de ambos también
saldrán a la luz qué hay detrás
de cada apariencia.
Más allá de los silencios
del cantor, hay una tensión notable
en el ambiente. Desde Alma que insta a que
el cantante recupere la voz, la Numis quien
hace la suerte de defensora-amante, hasta
Vogler que, entre tema y tema de fondo,
acomoda y desacomoda una escopeta, la expectativa
del público va en aumento.
En síntesis, Persona es la historia
de lo que a todos nos puede ocurrir en cualquier
momento: dejar de lado quienes alguna vez
fuimos para emprender otro camino, otra
mirada sobre el mundo, aunque tengamos muchas
Almas y Numis encima para evitarlo. Siempre
habrá un Vogler que con su silencio
desapruebe la lógica del sistema
en el que estamos inmersos; esa canción
complaciente y alienante nunca la escucharemos
de su boca, eso queda claro en esta obra.
¡Altamente recomendable!
J.M.C.
FICHA TÉCNICA: Persona.
De Galo Ontivero. Con Marcelo Saltal, Paulo
San Martín y Sabrina San Martín.
Asistencia de dirección: Sofita Dunayevich
Daly. Diseño de iluminación:
Claudio del Bianco. Diseño de vestuario:
Pía Drugueri. Fotografía:
Sol Blanco. Jueves a las 22 en Habitándonos
Espacio Cultural, Valentín Gómez
3155.
Espacio
Cultural Habitándonos
Con respecto a la sala Habitándonos,
es una muestra más que —por fortuna—
la historia del Abasto sigue reescribiéndose
a cada minuto. Primero hubo un hotel de inmigrantes
españoles, y en esa época —de
existir esta revista— podríamos
haber hablado con su gente sobre los paisajes
de España, hacer la América
y algún consejo culinario a la gallega.
Más tarde, llegó la pálida:
el abandono, el peligro de derrumbe, (como
su primo hermano de la esquina de Valentín
Gómez y Jean Jaurès, sí,
ese que hace unos años usamos de tapa
sobre la problemática habitacional)
y la ocupación. Por desgracia, ya estábamos
en el barrio y nos tocó hablar largo
y tendido de los edificios que se derrumban
(léase la nota sobre Defender Abasto
de este número). Sin embargo, contra
todo pronóstico, Cecilia Colombo y
Alberto Ivern, con ayuda de Lucía Lerendegui,
ladrillo sobre ladrillo, restauraron este
rincón abastense para convertirlo en
todo eso que hoy funciona en Habitándonos:
una sala teatral, la sede central de la Escuela
Latinoamericana de Mimo y Teatro Corporal,
el Taller de Teatro y entrenamiento corporal
expresivo.
Revista El Abasto, n° 148, octubre 2012.
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