Seguro bici
Considero de excelente criterio la implementación de las ciclovías en la ciudad. Es verdad que la bicicleta puede ser un medio ágil, silencioso y ecológico. Sin embargo, y esto puede ser por un tema de mi avanzada edad, siento inseguridad cada vez que tengo que cruzar una calle (y en ocasiones hasta por la vereda) dado que puede aparecer un ciclista de cualquier lado y hacia cualquier dirección. Y me pregunto: ¿qué sucede si me atropellan? ¿Están obligados a portar algún tipo de seguro o seré yo, como víctima, quien deba, llegado el caso, hacerme cargo de mi propia internación hospitalaria?
Gregorio Turletti

Parque lineal
Estimados amigos; viendo que el tema del soterramiento del tren que pasa bajo nivel desde Miserere hacia el Oeste, se me ocurrió una idea que podría solucionar, dentro de muy buena parte del ámbito de la ciudad que sería colocar PLACAS DE CEMENTO sostenidas por medio de columnas arriba del "túnel" y de esa forma se haría "un techo" sobre el cual se podría lograr realizar los lugares "verdes" y muchas otras cosas más que tanto necesita el barrio. Lo envío a vuestra ("nuestra") revista por la difusión que ella tiene y la llegada a tantas personas, tal vez alguno puede "agarrar el anzuelo" picar y ¡darle para adelante! OJALÁ SE PUDIERA LOGRAR ALGO, es para colaborar con todo el esfuerzo, que realizan los que están en el tema, tanto Uds., como el periódico del barrio y los vecinos aglutinados por el tema. Los saludo con el afecto de siempre. Muchas gracias
Héctor Rebasti

Red. La idea es muy buena. Es un proyecto que en la época de Ibarra se denominó Corredor Verde Oeste y el primer tramo, entre Billinghurst y Gascón, no solo estuvo aprobado sino que hasta consignada la empresa. Pero cuando cambió la gestión se cortó todo. De acá a unos años, anunciaron hace un tiempo desde Nación, un proyecto similar estaría llegando desde el oeste donde supuestamente arrancó ya una tuneladora. Estimamos que donde hay trinchera hecha harán solamente el techado, como vos planteas.

Sin vueltas Elecciones en Ecuador
Ser parte del mar, de ese movimiento de un corazón único que late en ritmo de alegría esperanzada. Eso nos ocurrió a un grupo de viajeros que fuimos a disfrutar el nuevo éxito de la patria grande. Envueltos en banderas argentinas y en las verdes de la lista de Correa, cantábamos en la fiesta que siguió al contundente triunfo.
   "Ya tenemos presidente" decía la voz articulada de tantos matices, y nosotros contestábamos "tenemos a Rafael" sabiendo que Rafael es Cristina, Evo, Hugo, Dilma, es América. También es, esos cuyos nombres nunca importaron, que tantas veces no tuvieron siquiera documentos, ni identidad reconocida. Cuando decían Rafael nos nombraban a cada uno de nosotros, que antes de estos presidentes veíamos los trucos del poder detrás del que tenía los atributos del mando, alejados de la escena.
   En el grupo había dos jóvenes de La Cámpora, pocos de edad mediana y otros, la mayoría, con la edad incierta, encendida, de los sueños y las pasiones.
Las imperfecciones humanas que tienen los que nos representan, no aquietan el empuje de seguirlos, más aún, los sentimos uno más llevando adelante los proyectos por los que murieron tantos. Todos éramos jóvenes en ese acto, pero algunos traían la historia de las luchas vividas y contadas para tejerlas con lo por venir.
    Recordé el poema de Tuñón que dice que el poeta es un espía de dios. Nosotros nos sentimos espías-protagonistas del reverdecer de nuestro continente expoliado, saqueado, sangrado. Mirando y hablando para contarles a ustedes y para deshacer las redes de mentiras, y ser al mismo tiempo un habitante de esa patria grande que disfruta lo que tanto esperamos y está llegando.
Cristina Villanueva