Si marchar los tres o
quedarnos los dos
En el Taller del Ángel
(Mario Bravo 1239) la obra de Ricardo
Racconto y Esteban Parola, dirigida por
Mariel Quintela, va desde los mandatos
sociales impuestos a la angustia de no
poder cumplirlos cuando la tragedia nos
arrastra por la banquina.
En sociedades urbanas,
a los pedos, donde se marca tarjeta hasta
para entrar al cajón, hacer el
duelo por la peor muerte que pueden pesar
sobre las espaldas de una persona —la
pérdida de un hijo— implica
dolor infinito, por lo que relativizarlo
se alza como alternativa. Así lo
descubre el matrimonio interpretado con
maestría por Ignacio Pagliere y
Vanina Ramírez cuando ambos deciden
tomarse una larga temporada de autoencierro
en un departamentucho: afuera está
el dolor, la realidad, la verdad de los
hechos que sufren en sus cuerpos y almas.
El puente de comunicación
para transmitir el dolor de ambos protagonistas
cuenta con peldaños de humor negro
con luces intermitentes de piedad, drama
e ironía. La situación en
la sala se torna confusa, hay risas de
tanto en tanto, son la forma en que el
público se descarga al ver cómo
marido y mujer sobrellevan con negación
una de las más terribles tragedias
que pueden pesar sobre las espaldas de
una persona.
Surge entonces la idea
de compensar esta ausencia: su niño,
el que murió en un accidente de
autos que a ellos sólo les representó
placas de hierro y clavos en sus cuerpos,
está representado para ambos en
una planta. Le hablan, le dan sopa, le
hacen upa; esperan —con cierta cuota
de desolada lucidez más que locura
irreversible— que les responda y
en eso se les va la vida rota que quedó
tras el choque.
El mundo exterior se
vuelve un papel de lija que amenaza arañar
sus desgarradas expectativas de felicidad.
Aún así, ver que la planta
sigue ahí pronto resquebraja al
matrimonio. Ella será la voz que
busque afrontar de una vez el duelo para
sepultar así su realidad chata,
cargada de ausencia. Él verá
su felicidad amenazada, por lo que la
tensión en aquel departamentucho
irá en aumento hasta que el alma
aguante.
Juan Manuel Castro
[email protected]
FICHA TÉCNICA. Obra:
Albarito.
Actúan: Ignacio Pagliere y Vanina
Ramírez. Música Original y
Diseño Sonoro: Santiago Barceló.
Vestuario y Escenografía: Mariel
Quintela. Diseño de Luces: Mariel
Quintela. Diseño Gráfico:
Letizia Lemme. Prensa: Correydile. Dramaturgia:
Ricardo Racconto y Esteban Parola. Dirección:
Mariel Quintela. Duración: 55 minutos.
Teatro: Taller del Ángel, Mario Bravo
1239.