Escuela cooperativa
Mundo Nuevo, Serrano 557
Cooperando
por un mundo nuevo
Sí
en la actualidad viviera Juan Domingo Faustino
Sarmiento, jamás se habría
imaginado en su proyecto educativo nacional,
el funcionamiento de una escuela organizada
a través de una cooperativa. Un modelo
de organización en el cual ningún
nivel educativo nos enseña, y que
poco conocemos.
La escuela cooperativa
Mundo Nuevo, se encuentra en Serrano 557
en el barrio de Villa Crespo. Allí
funciona desde 1976 pero se fundó
en octubre de 1972 en la zona de Belgrano.
“La Escuela nace porque a una maestra
de Washington School que estaba embarazada
deciden echarla. Por ese motivo se empezó
a armar una movida entre padres y maestros
de la escuela que se juntaron y decidieron
armar su propia escuela”, explica
Serena Colombo, directora de la escuela
desde el año 2010 , y forma parte
de la escuela a partir del año 1999.
En
la actualidad la escuela está integrada
por trescientos alumnos entre jardín
y primaria, y compuesta por setenta asociados
a la escuela. Esto significa que tanto un
docente o director, a una persona que se
encarga de la parte administrativa es asociado.
“Cualquier persona que trabaja acá
es asociado, eso es lo que tiene de interesante
una cooperativa de trabajo a diferencia
de otras cooperativas que son optativas”,
agrega Colombo.
La escuela cooperativa
se organiza en tres ámbitos. La primera
es el Consejo de Administración compuesto
por siete miembros elegidos entre los asociados,
y es el gobierno institucional de la cooperativa.
La segunda, es la asamblea de asociados
en la que se deciden diferentes cuestiones
institucionales. Por último, las
comisiones de trabajo donde cada una se
aboca a la resolución de temas específicos.
“Todos tenemos un trabajo que hacer,
yo no pertenezco al consejo pero formo parte
de dos comisiones, la de acción cooperativa
y la comisión de informática”,
agrega Serena.
Desde el año 2006
la escuela Mundo Nuevo es una escuela de
gestión. La ley de educación
reconoce este tipo de gestión distinta
a la privada y a la estatal. Por ese motivo
quienes supervisan la escuela en este momento
son por un lado la Dirección de Gestión
Privada (DGEGP ), y por el otro, el Instituto
Nacional de Asociativismo y Economía
social (INAES). “No recibimos subsidios
por parte de la DGEGP porque son únicamente
para trabajadores asalariados, nosotros
no lo somos. No así el INAES que
nos da subsidio para algún proyecto
puntual que consideren bueno apoyar”,
detalla la directora.
Uno de los objetivos de
la escuela por fuera de ella es dar a conocer
la función de la cooperativa, que
se entienda de que se está hablando
y de cuáles son los problemas. “Este
año en el Día del Trabajador
fuimos a la Legislatura a dar una charla”,
recalca Colombo. Por ese motivo uno de los
proyectos que tienen es el de escribir un
libro de escritura colectiva acerca de la
propia experiencia como trabajadores pertenecientes
a una cooperativa.
Como se vio, no hay un
solo modelo de educación, pueden
coexistir otros modelos de organización
educativa. Para que una sociedad progrese
debe tener la capacidad de cuestionar y
aceptar aportes de ideas nuevas o viejas
para mejorar el momento actual. Cooperando
entre todos se puede lograr un nuevo mundo.
Federico
Aizen