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Recortes
en el IFT
Convocatoria
frente al cierre del Teatro IFT
Décadas
y décadas recorrieron la historia
del místico teatro Idisher Folks
Theater (IFT), ubicado en Boulogne Sur
Mer 549. Es uno de los primeros teatros
independientes del país y uno de
los tres teatros con un escenario giratorio.
Fue un espacio de expresión artística
por donde pasaron varios personajes conocidos
como Arturo Bonín, Manuel Callau,
Manuel Iedvabni, Mercedes Sosa y León
Gieco.
Pero hoy la situación
se torna diferente. Ante la deuda de casi
dos millones de pesos la Comisión
Directiva piensa rescatar a la institución
con un estacionamiento subterráneo,
que tiene como objetivo la venta de las
cocheras para pagar la deuda. Por el momento
no hay espectáculos sino despidos
que sucedieron el martes 25 de febrero
a través de un telegrama, sin motivos,
a cada uno de sus respectivos trabajadores.
En total fueron tres empleados en blanco
y tres empleados en negros, nos detallo
una ex trabajadora del teatro.
Por ese motivo,
y ante la imposibilidad de realizar su
obra, el actor y director Daniel Loisi,
convocó para el día 5 de
marzo a las 20 en la puerta del IFT a
trabajadores, actores, artistas, periodistas
y público en general para poder
resolver el problema y evitar el cierre
definitivo del teatro.
Ese mismo día
la revista El Abasto dió el presente
al igual que algunos ex empleados, vecinos
y artistas, como Manuel Callau y Héctor
Bidonde. Este último ofreció
su teatro, que se encuentra en Nicolás
Repeto 1556, como espacio de continuar
con la reunión el viernes 7 de
marzo a las 18 con la intención
de evitar interrupciones en el ritmo de
la asamblea como sucedió en ese
momento cuando llegó la comisión
a las 21:30 pretendiendo participar de
la reunión.
La convocatoria no fue
masiva y se realizó en la puerta
del IFT, ya que no permitieron el ingreso
al edificio. Apenas unas sesenta personas
dieron el presente, y dada la ausencia
de medios masivos de comunicación,
a excepción de Página/12,
no se ha logrado la difusión que
merece el asunto. La convocatoria a la
reunión fue vía las redes
sociales.
Foto: Gustavo Volpin.
Este encuentro sirvió
para discutir distintas ideas y ver qué
salida se le puede dar al asunto. Es importante
que los legisladores estén al tanto
y que se pueda presentar un proyecto de
ayuda. Un dato importante es que el teatro,
el 31 de agosto del 2012, fue declarado
por la Legislatura de la Ciudad de Buenos
Aires sitio de interés cultural.
Lo que debería hacerse, se habló
en la asamblea, sería declararlo
patrimonio cultural, de esa forma el edificio
estaría protegido y se evitaría
realizar alguna reforma con el objetivo
de preservar al teatro.
El IFT no es solo
asunto de la comunidad judía, sino
que de todos los artistas, vecinos y del
estado que debe ser protagonista y evitar
el cierre de un símbolo de la cultura
nacional y popular, por donde han pasado
miles de artistas.
Desde la revista El Abasto
estaremos actualizando la información
sobre este tema a través del portal
de noticias revistaelabasto.com.ar/ y
el facebook /Revista.El.Abasto.
Federico Aizen
Más de ocho
décadas de historia
El Teatro IFT nació en 1932 y es
uno de los teatros independientes más
antiguos de Buenos Aires y del país.
Fue fundado por inmigrantes judíos.
Los locales para su funcionamiento fueron
cambiando hasta que en octubre de 1952 se
inauguró el edificio propio, ubicado
en Boulogne Sur Mer 547, construido, cuentan,
con el aporte solidario de toda la comunidad.
Ahí estuvo funcionando hasta la actualidad.
Sus instalaciones implican una sala principal
para 670 espectadores y 3 salas de 120,
100 y 60 espectadores, respectivamente,
sala de máquinas, salas de ensayo
y oficinas administrativas. El rol del IFT
ha sido importante al momento de la creación
de ámbitos de experimentación
y estudio teatrales y artísticos.
También ha prestado solidariamente
sus instalaciones para reuniones barriales,
como las primeras de consejo consultivo
de la (actual) Comuna 3. En su larga trayectoria,
siempre comprometido con el arte y la sociedad,
el IFT fue generador de grandes personalidades
en el plano actoral, de dirección,
creación escénica y musical,
como así también de una dramaturgia
inspirada en los mismos valores no conformistas
que motivaron su creación.
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Revista El
Abasto, n° 165, marzo 2014
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