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La empresa que “restauró”
la Plazoleta Alippi
hará un polideportivo para San Lorenzo
Maquillaje comunal
La firma Wallpac S.R.L. fue
cuestionada por su desempeño en el
espacio verde de Guardia Vieja y Estado de
Israel, que ahora luce una calesita concesionada
sin la participación de los comuneros.
Además de ganar una licitación
privada en Plaza Almagro, la empresa será
la encargada de hacer obras en Mármol
y Las Casas, frente a las tierras del Viejo
Gasómetro. De fondo, asoman irregularidades
en cómo se licitan y pagan las obras
comunales, aparte de la injerencia real.
La imagen de una pequeña plazoleta
con un par de rejas y absolutamente nada en
su interior, más que unas baldosas,
mugre y cables sueltos, se convirtió
este verano en una postal del imaginario de
espacios verdes de la actual gestión:
cemento y sinsentido.
Peor aún cuando se supo su costo: la
“Remodelación y Puesta en Valor”
de la Plazoleta Elías Alippi, en Guardia
Vieja y Estado de Israel, en el límite
norte entre Almagro y Villa Crespo, costó
casi un millón de pesos: $912.796.
Esta información oficial se desprende
de la Resolución Comunal N° 14.639.217/
COMUNA5/14 (Boletín Oficial CABA número
4498), que fue firmada el 8 de octubre del
año pasado por el Presidente de la
Junta Comunal 5, Marcelo Bouzas.
En la resolución anterior, la N°
12663433/COMUNA5/14 (BOCABA 473), donde se
llamaba a licitación privada por obra
pública menor (casos de menos de tres
millones de pesos), los considerandos indicaban
la necesidad de la puesta en valor por problemas
de “mantenimiento, limpieza e intrusión”,
según se había hablado en “reuniones
con vecinos”. En ningún momento
se afirma que se haya planteado esta situación
en el Consejo Consultivo Comunal 5 (Almagro
y Boedo), tal como correspondería según
la Ley Orgánica de Comunas.
La firma ganadora, surgida entre cinco aspirantes,
fue la empresa Wallpac S.R.L, dedicada a “obras
civiles, restauraciones, instalaciones, reformas,
transformaciones, servicios en general”,
cuyo domicilio fiscal está en Melincué
3082 y funciona desde 2012 bajo el CUIT 30-71286910-7,
según el sitio CUIT Online.
Si bien esta Resolución lleva la firma
del Presidente de la Junta Comunal 5, Marcelo
Bouzas, los comuneros no fueron consultados
al respecto de la obra y menos aún
sobre el resultado final. “La Junta
Comunal solo resolvió que se arregle
esa plaza, la Resolución que se nombra
es del Presidente de la Junta, del PRO, adjudicando
la obra y autorizando el gasto. Esa resolución
no es de la Junta Comunal, es sólo
del Presidente”, había dicho
a este medio en marzo el juntista Raúl
Sánchez (FpV).
Calesitas,
concesiones y muchas vueltas
La idea de una plazoleta que costó
casi un millón de pesos por sólo
baldosas y rejas quedó gravitando en
la mente de los vecinos porteños hasta
la instalación de un carrusel, que
ocupa al menos la mitad del breve espacio
de la plazoleta.
Después de un tiempo donde no se vieron
a obreros ni operarios trabajar en forma concurrente
sobre la plazoleta apareció esta novedad
e hizo replantear los costos de la obra: a
ojímetro uno podía pensar que
se justificaba el casi millón repartido
entre tareas de “puesta en valor”
y la adquisición de una calesita.
Sin embargo, los documentos oficiales son
los que aclaran esta situación. En
el pliego de bases y condiciones particulares
de esta licitación privada, en el punto
sobre “aceras y senderos”, se
aclara que la única tarea de la firma
Wallpac S.R.L. en cuanto a la calesita fue
“construir un nuevo soldado, aceras,
rampas para discapacitados y planteras reducidas”
para “ajustarse estrictamente a las
medidas indicadas para la correcta instalación
del carrusel y las instalaciones necesarias
para su funcionamiento”.
“También la empresa contratista
debía proveer un buzón, tablero
reglamentario y puesta a tierra para la alimentación
de energía trifásica con el
objeto de alimentar el sistema electromecánica
y de iluminación del carrusel a concesionar”,
aclara el pliego oficial. “La provisión
de la energía eléctrica y la
habilitación de la instalación,
deberá ser gestionada por el concesionario
del carrusel a su costa y cargo”, suma
el texto que tilda a Wallpac como “contratista”
y a la responsable de costear la calesita
como “concesionaria”.
Esta situación de calesitas concesionadas
sin consulta a las Juntas Comunales también
ocurrió en la Comuna 10. En particular
en las plazas Don Bosco, Terán y Ciudad
de Banff. Para tener una mayor precisión,
la integrante de la Junta Comunal 10 Maru
Lopes elevó un pedido de información
pública para saber cómo se había
designado la instalación de los carruseles.
Según le respondió el Gobierno
de la Ciudad en el expediente 3879841, es
la Dirección General de Concesiones
la que otorga estos espacios, pero la misma
“no ha efectuado ningún llamado
a licitación pública ya que
el procedimiento administrativo para el otorgamiento
de concesiones de uso en espacios verdes de
uso público, indica que estos se realizan
a través de permisos de uso precario
y oneroso en los cuales interviene la Dirección
General de Espacios Verdes en virtud de las
competencias que le fueran conferidas a esa
unidad de Organización por la normativa
vigente”.
“O sea: el contrato no sólo no
lo celebra la Comuna, ni siquiera la Subsecretaría
de Gestión Comunal y Atención
Ciudadana. Seguimos descubriendo Direcciones,
Secretarías que sólo complican
el acceso a la información. No es casual.
Resulta que existe una Dirección General
de Concesiones, pero tampoco es esa oficina
la que en este caso tiene competencia, ya
que lo toma Espacios Verdes. Una vez más:
las comunas, bien gracias”, lamentó
la juntista al explicar el entramado de responsabilidad
y decisiones dentro del gobierno porteño.
En cuanto a la Comuna 5 se da el mismo proceso,
según contaron varias fuentes a este
medio. Esto significa que ninguno de los juntistas
ha logrado ver los papeles oficiales sobre
la concesión ni quién es la
persona que va a llevar adelante la misma.
Después de Alippi,
más obras
Lejos del debate sobre las competencias de
las Comunas, y más allá de que,
una vez probado que efectivamente se pagó
casi un millón por unas baldosas y
rejas, la firma no quedó contra las
cuerdas y ganó varias otras contrataciones
de obras para la Comuna 5.
La más resonante es la asignada en
la Resolución Comunal N°2741893/Comuna5/15,
fechada el 11 de febrero de este año
(BOCABA 4579). Según el texto, que
también lleva la firma del Presidente
de la Junta Comunal 5, Marcelo Bouzas, a Wallpac
S.R.L. se le adjudicó la obra “Instrumentación
del Convenio de Gestión y Colaboración
entre el GCBA y CASLA Construcción
del Gimnasio Polideportivo San Lorenzo de
Almagro. Primera Etapa. Obra Estructura de
Hormigón, Baños, Vestuarios
y Cerramientos Perimetrales Metálicos”.
Se trata de un predio ubicado entre José
Mármol, Salcedo y Las Casas, según
el texto oficial.
Esta labor tiene el costo oficial de $2.997.277,50,
según la información comunal,
monto que se imputará en el Presupuesto
2015. Esta obra se avala en el marco de dos
convenios de colaboración entre el
Gobierno de la Ciudad y el Club Atlético
San Lorenzo de Almagro, consensuados en marzo
del año pasado, para el “armado
de un polo educativo en el Bajo Flores y de
otro espacio recreativo, social y deportivo
en el barrio de Boedo”.
En cuanto a este último barrio se estipulaba
que Ciudad cediera “a favor del club
por un plazo de cinco años el uso de
un predio ubicado en la calle Doblas 1768”,
ubicado a tres cuadras de donde se hace el
polideportivo. “En este caso San Lorenzo
tomará a su cargo el conjunto de obras
necesarias para cumplir con los fines establecidos”,
informó el portal oficial del gobierno
porteño en el artículo “Macri
firmó un acuerdo con San Lorenzo para
hacer un polo educativo en el Bajo Flores”.
Al cierre de esta edición, a fines
de abril, el equipo de futsal femenino practicó
por primera vez en el terreno de Las Casas,
donde se hará el polideportivo mediante
la resolución de la Comuna 5.
También los cuervos celebraban un hecho
de relevancia histórica: lograron la
escrituración de la propiedad de José
Mármol 1691, donde funciona la Casa
de la Cultura Sanlorencista, con el esfuerzo
de la Sub Comisión del Hincha. Este
inmueble, donde hoy se realizan una gran cantidad
de actividades culturales, está ubicado
frente al pedio en cuestión.
La tercera licitación privada que había
ganado Wallpac fue para la Plaza Almagro.
El 15 de octubre del año pasado apareció
en el Boletín Oficial porteño
la Resolución Comunal N°15073082/COMUNA5/14
donde se le adjudicaba la obra “Remodelación
y Puesta en Valor de un Puesto de Atención
al Público en el Interior de la Plaza
Almagro”.
El costo de este trabajo fue de $855.038,
según la resolución con firma
de Bouzas. Los planos de esta obra los habíamos
difundido en nuestra edición gráfica
del mes de septiembre pasado.
El trasfondo: el peso
específico de las comunas
Fuentes comunales informaron a este medio
que este tipo de resoluciones “son atípicas”,
frente al articulado de leyes vigentes. “Operan
como una suerte de Decreto comunal, que especifica
la obra y el presupuesto aprobado, pero como
las Comunas no poseen "Jurisdicción
Presupuestaria", el pago debe efectuarse
en forma centralizada, por medio de la Secretaría
de Gestión Comunal y Atención
Ciudadana dependiente de la Jefatura de Gobierno
que a estos fines dispone de la tristemente
célebre ´Jurisdicción
90´. Las órdenes de pago son
contabilizadas por la Dirección General
de Contaduría del Ministerio de Hacienda”.
Del mismo modo, desde la Comisión de
Descentralización Comunal de la Legislatura
se refirieron a esta situación y afirmaron
que las comunas están como “un
híbrido, una Dirección General
del gobierno, pero que depende de la Secretaría
de Descentralización Comunal, que hoy
en día dirige Eduardo Macchiavelli”.
“Falta una decisión política
para que las comunas puedan firmar una licitación,
llevar adelante el proceso y pagar ellas mismas
las obras”, añadieron.
Varios comuneros, entre oficialismo y oposición,
se quejaron, en off, sobre la situación
que hoy se vive. “El Presidente es quien
firma las licitaciones, pero en realidad debe
hacerse con el consenso de la Junta, lo que
ocurre es un limbo si se tienen en cuenta
las normas comunales”, resumieron.
En resumidas cuentas, el caso de la Junta
Comunal 5, Wallpac S.R.L. y las obras que
se ven y verán en los barrios de Almagro
y Boedo dan cuenta de cómo está
el panorama descentralizado en la Ciudad,
y cuantos entretelones encierran cada una
de las licitaciones que luego los vecinos
vemos en forma de obras públicas.
J.M.C.
Revista
El Abasto, n° 179, mayo 2015
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