Alta posicionamiento en buscadores y directorios Abasto

            

Agregar a Favoritos | Buscar | Preguntas | Mapa del sitio | Contactar |

INICIO GUIABASTO HEMEROTECA CARTELERA LINKS CONTACTO BUSCAR

 


   


 

Centro Navarro, una de las instituciones más longevas de Almagro

Centro Navarro: la tradición de fiesta

En Almagro, Moreno 3682, celebran 120 años de deporte, bailes y gastronomía.
Parece la puerta de un castillo por sus hierros y maderos sobre un arco empedrado, pero es el ingreso al Centro Navarro, una de las instituciones más longevas de Almagro. Por dentro, la idea de estar en un fuerte medieval continúa gracias a sus muros de madrea pulida, sus coloridos vitreaux, sus salones con arañas y techos altos.

   A tres cuadras de avenida Rivadavia se respira un aire a contramano de la urbanidad y el cemento monótono, con el fin de mantener vivas las tradiciones de la comunidad española de Navarra, cuya descendencia llegó a esta ciudad a fines del siglo XIX.
   Cuentan los socios que el 3 de noviembre de 1895 un puñado de navarros porteños fundaron el Centro Orfeón Gayarre para “tener unido el espíritu” ibérico. Su primera sede estuvo en Tacuarí 472 y a fin de siglo la renombraron Centro Navarro de Buenos Aires. En 1933 se mudaron a Almagro, con un acto donde colocaron un escudo traído de España que aún se luce en el frente de la calle Moreno.
   “Desde entonces se realizan actividades culturales, abiertas a los vecinos y descendientes navarros”, cuenta el presidente Esteban Kordich. “Ha pasado de generación en generación y hoy nos toca celebrar los 120 años, una alegría por este sitio de pertenencia”, sumó.
   Los más de 160 socios pasan sus tardes en varios puntos de la sede. En la esquina está el restaurante, abierto a todo el público, con platos tradicionales españoles. Otros optan por las clases de bachata, tango y taekwondo que se dictan durante la semana.
   En cuanto a lo tradicional, los sábados ensaya el cuerpo de baile del Centro Navarro. Otros socios, en cambio, optan por la charla de café en el barcito de planta baja, ubicado frente a la cancha, o trinkete, de pelota paleta.
   Arriba, en el primer y segundo piso, hay salones con pianos de cola, mesas y espacio para jugar a las cartas. Según cuenta Jesús, el casero, el favorito de muchas socias es la canasta. Allí ensaya también el cuerpo de baile, que incluye el uso de “cabezudos”, unos cascos gigantes con rostros caricaturescos, en este caso con motivos de reyes y bufones.
   Otro de los orgullos de esta casa hispánica es su biblioteca. Armada con donaciones de socios en distintas épocas, se puede ver una gran cantidad de volúmenes de literatura universal junto a libros sobre España, algunos en vasco. Incluso, tienen actas navarras incunables del 1700, forradas, según sus referentes, “con piel humana”.
   “Este año, entre el aniversario y las fiestas de San Fermín en julio, tuvimos el gran momento para celebrar que desde hace 120 años mantenemos nuestras raíces vivas”, cierra Kordich.

J.M.C.




Revista El Abasto, n° 182, agosto 2015



 

 

Webstats4U - Web site estadísticas gratuito El contador para sitios web particulares
Contador gratuito

 

Copyright www.revistaelabasto.com.ar - Mientras mencione la fuente permitimos su reproducción.