Quema 2015
Quemadas las brujas, los
monstruos, los brujos y sarasas varias…
Quemamos el individualismo, el consumo
del mercado y lo que hace con nosotros…
Quemamos muñecos de madera al paso,
quemamos soledades, aunque sea por un
rato…
Quemamos las burocracias del estado que
nos impiden muchas veces no poder concretar
estos encuentros únicos y mágicos.
Quemamos una espera larga, de casi dos
meses, donde la sensación es que
el tiempo se detuvo, éso también
quemamos… quemamos ese tiempo eterno
que nos enredo durante lluvias, partidos
y decisiones...
San Juan San Pedro, San Pablo, La Pachamama…
el fuego – el aire, la tierra –
y el agua, se hicieron ritual, grupal,
canción. Barrial. Callejero. En
el espacio público. Donde nos encontramos
todos. Donde hay una porción del
barrio que elije, con el derecho de elegir
su fiesta popular, la vieja quema de muñecos.
Nos acercamos a una calle peatonal un
fin de semana, -previo trámites
burocráticos que también
quemamos, por la necesidad de que no sea
una travesía cada vez que lo hacemos…,
y nos acercamos humanos de diferentes
identidades barriales, e hicimos una pausa
a la cotidianidad de un barrio.
Proponiendo encuentro, espacios…
jugamos en la calle, en una frontera de
todos pusimos “lo nuestro”,
50 pacientes del Hospital Ameghino, 40
adultos mayores en el Cesac, 25 familias
de La Vereda, otras tantas familias en
las juegotecas Creciendo y Almagro, 30
facilitadores en formación para
trabajo comunitario JUPSI de la casona
de Humahuaca, los Vaca Bonsai registrando
el momento. La bruja construida por los
pequeños de apoyo escolar del local
de Nuevo Encuentro, más la Escuela
16, más vecinos, más amigos,
más familia... más esas
relaciones que se hacen por ese día,
las chicas del grupo del trabajo práctico
por Cujuca, los chicos de los tambores
que ya hace mucho nos acompañan
haciendo el ritual de mezcla entre tambor
y fuego. Latido y quema... los bomberos
y el Sr. que se encontraba durmiendo cuando
llegamos a armar la calle.
Si Sres y Sras/ Niñas y Niñxs
¡LO QUEMAMOS! QUEMAMOS TODO ESO
y lo que cada uno deseó cuando
se prendió ese fuego…
Ese fuego sigue aún en el cuerpo:
Fuego de amor.
Fuego de tenacidad.
Fuego de compromisos.
Fuego de nuevos encuentros.
¡Y ese fuego nos esperará
hasta el año que viene!
Abrazo con fuego eterno.
Casona Cultural Humahuaca
Foto: Zelaya con la fogata. FB
Red Rioba Abasto.