Sabores de
Galicia
Tuy Salceda
En
Almagro el centro une gastronomía
y música para rescatar las tradiciones
españolas.
Entre el paisaje
de casas bajas al sur de Almagro sobresale
una vivienda amarilla con farolitos y
balcones de hierros labrados. Bajo las
banderas de Argentina, España y
Galicia está el ingreso a la Asociación
Mutual, Cultural y Recreativa Tuy Salceda
(Maza 457), casa fundada a principios
del siglo pasado por emigrantes gallegos.
Por dentro, el aroma a comida recién
hecha se entremezcla con la música
y cantos típicos. Sus muros lucen
emblemas, esculturas y fotos regionales.
“Cien años atrás,
los inmigrantes llegaban a la ciudad y
buscaban casas españolas como esta
para encontrarse con sus iguales, hoy
nuestro objetivo es mantener vivas las
costumbres gallegas”, cuenta el
presidente Horacio Satarelli.
En la planta baja
está el restaurante, que abre de
martes a domingo y se especializa en cazuelas
de mariscos, paellas y calamares. En los
pisos superiores están la secretaría
y la biblioteca. Entre cruceiros en piedra
gallega, mayólicas y otros suvenires,
tienen enciclopedias y obras universales,
como el Martin Fierro, en legua gallega.
En su archivo también hay cartas
de la Guerra Civil Española que
enviaban familiares de los socios. “Junto
a notas de otras épocas dan testimonio
de la historia de la emigración”,
cuenta Silvia Amaya, socia y tesorera.
Asimismo, más
de una treintena de socios integran la
agrupación folclórica Baixo
Miño, compuesta por un cuerpo de
gaita, danza y cantareiras. En Tuy Salceda
también ensaya un coro polifónico,
con repertorio gallego y popular, y el
Ballet Folclórico del Buen Ayre.
La institución,
que cuenta con 400 socios, es el resultado
de la fusión de varias agrupaciones
hispánicas. La Sociedad de Salceda
nació en octubre de 1913 y la de
Tuy en marzo de 1917. Ambas se fusionaron
el 1 de enero de 1975. Luego en el 87
se les sumó la Casa Cardelas y
la Asociación Galicia en Buenos
Aires (representaba a Chantada, Becerreá
y Carral); en esta fusión Tuy sumó
un campo de deportes en San Isidro.
Esta vasta cruza
de descendencias se aprecia en sus festejos
patronales. Evocan a San Telmo, a la Virgen
de la Concepción, a la Virgen de
Rocha, entre otros. Para el aniversario,
que se hace en noviembre, hay almuerzos
con música y baile tradicional.
Cierran el año al brindar con queimada,
bebida alcohólica gallega con propiedades
curativas para “ahuyentar malas
ondas”.
Hoy que la inmigración
está sólo en libros de historia
y el recuerdo de socios longevos, en Tuy
Salceda, resalta Satarelli, se busca “compartir
el legado gallego con nuevas generaciones
que sientan propia esta cultura, más
allá de su origen”.
J.M.C.