La Canchita de Patricios
llega a San Cristóbal:
“Una idea de juego
jamás se abandona”
El club fundado
en 1920 ahora tiene un anexo en Esteban
de Luca y Constitución, al lado
del bajo autopista donde se practica fútbol.
Los vecinos le
dicen “la Canchita”, es el
código del barrio, el apodo que
está desde siempre. El Club Atlético
Parque de los Patricios, a casi cien años
de su fundación, se mantiene vigente
en las tardes de deporte y bufet en su
sede social de la calle Alberti y ahora
en su anexo de San Cristóbal, con
dos canchas descubiertas.
A este clásico
del sur porteño lo fundaron vecinos
el primero de julio de 1920. El parque
que da nombre al barrio, y al club, fue
el punto de referencia. A su alrededor
tuvieron las primeras sedes. Al principio
los socios se avocaron al atletismo, en
especial las carreras y lanzamientos.
En los años treinta,
se mudaron al 2100 de la calle Alberti.
Convirtieron el baldío de aquel
entonces en la que fue su sede definitiva.
El básquet se convirtió
en el deporte preferido y lo practicaron
en una cancha de polvo de ladrillo que
fue el corazón del club. Formaron
parte de la Federación Argentina
y disputaron campeonatos en varias categorías.
De aquellos años
dorados también se evocan con cariño
los bailes de carnaval. “En los
sesenta y setenta se llenaba el club,
los colectivos venían desde el
centro y paraban en la esquina, las familias
venían y disfrutaban”, recuerda
Beto, socio y habitúe del bufet.
Al día de hoy,
el Patricios se mantiene vigente a través
de sus 1500 socios. La sede cuenta con
un bufet, una cancha de baby fútbol,
las oficinas de secretaría y un
primer piso con un salón. En los
muros del ingreso se lucen trofeos de
todas las épocas. En tanto, los
colores azul, negro y blanco se replican
en todos las demás paredes ya que
juntos, en forma de cruz de malta, son
el emblema del club.
“El fútbol
(Fafy), el patín artístico
y el vóley (Federación Metropolitana)
son las actividades más convocantes,
hay escuelita y competencia”, describe
el bufetero del lugar. “Arriba hay
un salón donde se dictan clases
de taekwondo, yoga y danza. También
los segundos viernes de cada mes hay espectáculos
de tango”, suma al respecto.
En el presente el club
disfruta de haber acondicionado y puesto
en marcha un predio en San Cristóbal,
ubicado en la manzana delimitada por Esteban
de Luca, Cochabamba y Constitución,
tras un acuerdo con el gobierno porteño.
El lugar tiene dos canchas
descubiertas, baños, vestuarios
y salas de secretaría. Los suelos
y muros están pintados en azules,
negros y celestes, a tono con la casaca
de los niños, mujeres y adultos
que practican con la redonda desde la
caída del sol. Algunos, sobre todo
los entrenadores, llevan remeras con la
leyenda: “Una idea de juego jamás
se abandona”. También se
hacen encuentros amistosos con instituciones
de la zona. Al momento de hacer nuestra
visita, el equipo de fútbol femenino
se las veía contra las del equipo
Piraña de Patricios; un clásico
vecino en tierras cercanas al Abasto (véase
foto).
Los vecinos memoriosos ubican en estas
coordenadas al club Toabas (Abasto al
revés), institución que
funcionó varios años en
el sur de la Comuna 3. Allí también
había fútbol para chicos
y merendero.
La llegada de “La
Canchita” al barrio de San Cristóbal
fue con un aval en la Legislatura en 2011.
Tras una remontada por un veto del Ejecutivo,
el año pasado pudieron instalarse
para replicar todo el trabajo que hace
casi cien años acompaña
la vida de los vecinos en Patricios.
Juan Manuel Castro
[email protected]