El Expreso que nunca se
detuvo
El expreso Imaginario continúa marcando
generaciones. Así quedo demostrado
con la 5ª redacción abierta,
hecha el sábado en la Facultad de
Medicina de la U.B.A. Junto a sus creadores,
se compartió una jornada de charlas,
música y exposiciones, para culminar
con una fiesta hasta el amanecer.
Desde el mediodía,
con un almuerzo comunitario, la Facultad
de Medicina abrió sus puertas para
una jornada cultural, junto a decenas de
artistas y expositores.
La murga que ensayaba
sobre la Plaza Houssay
ponía color desde el minuto cero.
Al entrar, una frase resumía: “Poco
para ver, mucho para hacer”. Haciendo
caso al dicho, uno primero se topaba con
el stand del Expreso, afiches de la jornada
y material relacionado con el la revista
llenaban la mesa.
A su vez, en el
hall de acceso, puestos de huertas
urbanas llenaban de verde el espacio.
La manera de producir alimentos propios,
dentro del gris cemento de la ciudad, tenía
su explicación en cada parada.
En medio de ese
clima festivo, y todavía con una
larga jornada por venir, hablamos con el
periodista Ezequiel Abalos:
“Es súper interesante una experiencia
así, con gente exponiendo. Marcó
mi adolescencia el Expreso Imaginario, encontré
allí un grupo de gente con la que
compartía pensamientos. Está
bueno redacción abierta como concepto;
te invita a participar”.
Con respecto a los
ejes principales a tratar en las charlas,
el escritor nos adelantó: “Están
tocando dos temas muy importantes. Por un
lado, la problemática de gente en
situación de calle, que en los últimos
diez años se agravó. Esta
bueno que se traten estos temas, no como
una cifra, sino con una mirada cercana.
Sobre el otro punto, la Ley de Medios, destacó
el “cómo contar la realidad”.
Más adelante,
sobre el pasillo central, los stands
se sucedían, como nos adelantó
Abalos, poetas, militantes, comunicadores
y mucha más gente confluía
en un encuentro que trascendía las
disciplinas. La idea de lo colectivo, de
cooperación fueron las grandes sensaciones
al recorrer los pasillos.
A la par de la feria,
el programa radial Patologías
culturales transmitía con
parte de su staff en Medicina. Para la ocasión,
se juntaron Pipo Lernoud, Jorge Pistocchi
y Horacio fontova, en el aire de La Tribu,
para rememorar anécdotas de la revista
y la época.
Un rato antes, nos
cruzamos en la puerta con el negro
Fontova, con quien charlamos un
rato. “Viví esta semana previa
emocionado. Imaginate, hace treinta años
que se originó la revista, pero es
algo que nunca concluye”, reflexionó.
Destaca “el orgullo de haber participado
en una resistencia que aún sigue
actuando, que corresponde hacer ahora con
los tiempos que corren”. “El
efecto dominó va funcionando afortunadamente”,
metaforizó con una risa entre los
dientes.
En el Aula Magna,
un gigantesco espacio donde las miradas
se centraron en el circo de los
hermanos Trivenchi. Los artistas
mostraron su habilidad y buena onda para
con los presentes. Parte del espectáculo
que hacen en su cede lo trasladaron a Medicina.
Del mismo modo,
dicha sala fue sede de las charlas memorables
de la jornada. Una intervención puesta
en la entrada introducía al tema:
Se rescataban fragmentos periodísticos
sobre gente con su derecho a la vivienda
digna vulnerado. Una sesión de fotoperiodismo
reforzaba esta propuesta y abría
las puertas al mundo de los sin techo.
Es así como
el tema situación de calle fue desarrollado
por el panel indicado. De un lado, gente
de la ONG Médicos del Mundo.
A través de una proyección
se mostraron los antecedentes y cómo
se trata la problemática en la actualidad.
A su vez, testigos directos de esta estuvieron
para dar su voz: Miembros de la asociación
civil Proyecto 7 gente
en situación de calle, vendedores
de Hecho en Buenos Aires y vecinos de las
Barrancas de Belgrano que brindan solidariamente
asistencia a gente sin hogar. El rol del
estado y las políticas habitacionales
en la ciudad de esta gestión fueron
abordadas desde varias perspectivas. La
rica experiencia sirvió para comprender
qué es lo que sucede, por qué
fallan las estrategias oficiales y, sobre
todo, qué piensan y cómo viven
los sin techo.
Mas tarde, cerca
de las siete y media, parte del staff
del Expreso Imaginario
pasó al frente para compartir con
el público anécdotas y reflexiones,
casi treinta años después
del comienzo de este camino. Pipo, Jorge
Pistocchi, Alfredo Rosso, Claudio Kleiman
y Horacio Fontova, con proyección
de por medio, recorrieron algunas de las
páginas más memorables de
la publicación. La alegría
de haber gestado aquel proyecto se hacía
evidente cuando dichos integrantes hablaban
de cómo trabajaban en la revista:
desde las ilustraciones, hasta la distribución
¿Uno de los secretos infalibles del
Expreso? “Cuando me preguntaban cómo
había que hacer para elegir los contenidos
de una publicación, les decía
que no reproduzcan los mensajes de los grandes
medios, la idea estaba en generar contenidos
propios”, expuso Lernoud.
Medios de comunicación
y ambiente, tópico donde esta publicación
fue pionera en explorar, fueron otros de
los temas abordados. La jornada no terminó
con la última charla ni el último
debate; sino todo lo contrario. Cerca de
las doce, estaba planeada “otra noche
inolvidable del Expreso Imaginario”,
con la actuación de Sofía
Viola, Parmi, Mahatma Dandi, Papas negras;
aparte de una varieté.
Esta quinta redacción
abierta fue una nueva estación en
el largo camino de este Expreso. En sus
vagones lleva ya varias camadas de imaginadores;
en palabras de uno de sus miembros, “una
resistencia que nunca se termina”.
J.M.C.
Buenos Aires,
28 de septiembre de 2009