Del lado de Agüero vimos ya asestados un gran número de policías ante las puertas del hipermercado del barrio. Del otro lado la situación era similar o peor, a juzgar por la cantidad de integrantes de la Policía Federal. La razón se encolumnó en seguida. Militantes de la combativa Quebracho se acercaban a Coto para protestar en contra de la suba indiscriminada de sus precios.

En total pudimos vislumbrar una manifestación de casi dos cuadras. Nos acercamos a un flaco, al cual preferimos no preguntarle el nombre para mantener su integridad (dada la privación de libertad que sufren un par de miembros de dicha agrupación*) quien comentó que la semana pasada en una movida similar ya habían ido a la Shell en su campaña “Contra el ajuste, la devaluación y la inflación” y que esta vez le tocaba a COTO. Campaña cuyo punto final sería la Sociedad Rural. En definitiva, una serie de grandes empresas o corporaciones que se han beneficiado históricamente con las devaluaciones que venimos sufriendo cada dos por tres. “A Alfonsín lo rajaron con saqueos y devaluación. Acá están intentando lo mismo. Por eso salimos. Porque el control de precios se hace con poder popular”.

El portal de Quebracho profundiza: “Pueblo o corporaciones”. “Con los extorsionadores no hay cooperación, posible. O se los combate o se es cómplice de quienes especulan a costa de la miseria del pueblo. A los 90 no volvemos. COTO, yo lo conozco.” Ahí mismo sostienen como ejemplo que un kilo de yerba que no baja de los $32 “se la compran al tafetero por 50 centavos!”

Más abajo, agregan: “La tarea es pararse de manos contra los verdaderos saqueadores, contra los de cuello blanco y corbata, contra los que fugan las ganancias al exterior, contra los que quieren que perdamos las conquistas de estos años. No nos quedaremos de brazos cruzados ante un proceso devaluatorio, inflacionario y de aumentos de tarifas”.

U.K.

*¿Presos políticos?

El líder de la agrupación Quebracho, Fernando Esteche, y a Raúl Lescano fueron detenidos en diciembre luego de que la Corte Suprema de Justicia confirmara la condena a tres años de prisión dictada por un tribunal oral de la Capital Federal.

A Esteche se lo acusa de ser el autor ideológico por la protesta y escrache que terminó en graves daños contra un local en Capital Federal del entonces gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, luego de que éste ordenara la represión de la marcha docente en la que murió asesinado el maestro Carlos Fuentealba. Esteche no estaba en el lugar de esos disturbios, pero quedó preso. El asesino de Fuentealba en cambio está en libertad.