183 años de Balvanera, en la calle y en la iglesia

Hoy viernes 1 de abril la lluvia no detuvo los festejos por el aniversario barrial. Hubo actividades en el Pasaje Discépolo con estudiantes del Normal 9 y se desarrolló una misa en la Parroquia Nuestra Señora de Balvanera. Los
el

El lluvioso viernes 1 de abril Balvanera cumplió 183 años. Al mediodía hubo una muestra de estudiantes del Normal 9 en el pasaje Discépolo. Por la noche se celebró una misa de acción de gracias en la Parroquia del barrio (Mitre y Azcuénaga). La Comuna 3 (Balvanera y San Cristóbal) está al frente de la organización y difusión de estas actividades festivas, que incluirán varias jornadas culturales gratuitas durante todo el mes en espacios como el CC Ricardo Rojas, el Teatro Luisa Vehil y el Congreso, entre otros sitios emblemáticos.

La hora de los chicos y chicas

El primer tramo de los festejos del viernes ocurrió, en un típico mediodía nublado de otoño, sobre el pasaje Discépolo, a metros de Callao y Corrientes, donde está emplazado el Normal 9.

Sus estudiantes de nivel inicial ofrecieron una exhibición pictórica, que contó con el acompañamiento de sus docentes, quienes recibieron un diploma distintivo por parte de autoridades de la Comuna.

También participaron los comuneros locales. Estuvieron: Verónica Bruk y Lucas Ñúñez (ECO); Nicolás Mansilla Asen y María Santiago (PRO); María Suárez y Gabriel Zicolillo (FpV). También se desarrolló una feria de la solidaridad donde se juntó ropa para donar.

La misa bajo lluvia

A las 19.30, hora en que más diluvió, estaba pautada la misa de acción de gracias en la Parroquia Nuestra Señora de Balvanera, en Mitre y Azcuénaga. Rato antes, ya había varios fieles que rezaban salmos y escuchaban la música del órgano principal. Otros tantos rezaban a San Expedito o se confesaban.

A la hora señalada el cura Walter Marchetti encabezó la misa ante más de medio centenar de vecinos. “Acompañamos con la eucaristía a la Comuna”, dijo. Primero hubo rezos y cantos alusivos. Luego, una de las mujeres que integran la comisión de la parroquia leyó la Biblia. A una semana de celebrar Pascuas, se oyó un tramo de Hechos de los Apóstoles: un pasaje donde luego de resucitar, Jesús, sin revelar su identidad, ayudó a los Apóstoles a hacer una buena pesca.

El cura Marchetti luego, en tono coloquial y cercano, mechó el texto bíblico con el aniversario de Balvanera. Explicó que allí se narra un episodio de la vida cotidiana de los Apóstoles. Destacó además la necesidad de “saber de dónde se viene para entender hacia dónde se va” con los actos del día a día.

El legado del Miserere

Dijo que la parroquia está ligada al barrio en sus raíces, en sus inicios. Contó en forma breve la historia de los terrenos que hoy ocupa Balvanera, desde fines del siglo XVIII hasta mediados del XIX. Recordó que era un camino solitario, una periferia de la aleda colonial. La pobló un comerciante español y la heredó su sobrino, el famoso Miserere. Este donó tierras al rey hispano, quien envió frailes franciscanos de La Rioja (España) para levantar un hospicio. “Ellos adoraban a una virgen ¿cómo se llamaba?”, preguntó el cura al público. “Balvanera”, le respondieron en un tramo distendido de la misa aniversario. “Sí, pero con V corta”, remarcó Marchetti.

El cura sumó que entre 1805 y 1806 se erigió una pequeña iglesia, el antecedente del gran templo contemporáneo, pero que la fecha 1 de abril es la oficial porque fue cuando se instituyó en forma oficial a Balvanera como parroquia. Fue en 1833, a pedido de los vecinos, porque “era en torno a las parroquias que se anotaba a los vecinos, que se registraban sus propiedades, era parte de la organización urbana”, según el cura.

Sobre el presente del barrio, Marchetti destacó a Balvanera por su “pluriculturalidad”. Mencionó la presencia de comerciantes judíos en la zona de Once, de árabes en el límite con San Cristóbal y la influencia de la gastronomía peruana en torno al viejo Mercado de Abasto. Celebró que en estas calles conviven “muchas formas distintas de ver el mundo”.

Para cerrar, dijo que es “un orgullo de nuestra comunidad parroquial” estar en la historia de Balvanera “desde su raíz”, porque fue en torno a la parroquia que se organizó la vida social en este terreno de quintas que pasada la época colonial se convirtió en uno de los barrios más diversos de Capital.

El brindis

Mientras se desarrollaba la misa, en uno de los pasillos laterales de la iglesia funcionarios comunales arreglaron una mesa con empanadas y sánguches de miga para el brindis de cierre.

También montaron pancartas alusivas al aniversario de Balvanera, donde exhibieron fotos de sitios emblemáticos. Entre ellos estaban el Mercado de Abasto, la Torre Saint, Plaza Miserere, La Perla, el Congreso, Teatro Picadero, entre otros sitios de interés.

Un dato de color son los globos que inflaron y colgaron sobre los carteles alusivos: eran rojos y verdes, mismos colores de las velas que los fieles le prenden a San Expedito en el patio de la parroquia. También las suelen dejar ante la estatua de la nave central. 

Iba a estar presente durante el brindis el Presidente de la Junta Comunal 3, Carlos Breyaui (PRO), pero por un problema de salud no pudo ir, confirmaron sus allegados. En su lugar estuvo el comunero Nicolás Mansilla Asen.

Ante este medio, Asen destacó la concurrencia de los vecinos, a pesar de la lluvia. Dijo que le entusiasmaba transitar su primer aniversario barrial como juntista. Destacó el gran número de propuestas gratuitas que habrá a lo largo de abril. “Hace tiempo no se hacía todo el mes. Habíamos pensado hacer una Semana de Balvanera, pero nos estiramos a hacer abril completo. En el barrio hay muchas instituciones y propuestas”, agregó.

Junto a Mansilla estuvo Alejandra Fontanazza, de la Dirección de Descentralización y Participación Ciudadana. Ambos entregaron al cura Marchetti un diploma recordatorio. “Este homenaje corre para toda la comunidad parroquial”, agradeció el religioso.

Una vez que los presentes se ubicaron en torno a la mesa servida, el cura Marchetti ofreció unas palabras de unidad. Todos levantaron sus vasos para cerrar, en clima comunitario, el lluvioso viernes en que Balvanera cumplió 183 años. 

La seguimos en el bar

A las 21 estaba pautado un recital gratuito del grupo Los Muchachos Errantes en el Bar Notable La Academia, en Callao 368. "Un lujo tenerlos acá", destacaron los encargados del café ubicado al límite con San Nicolás.

Los músicos farristas recibieron de manos de Asen varios diplomas para celebrar su participación en los festejos de cumpleaños.

Al igual que la misa, a pesar de la lluvia, la concurrencia fue buena. Las mesas del celebrado bar estaban llenas. Los aplausos a la nutrida banda se hicieron oír bien fuerte. 

Quienes deseen escuchar de vuelta a Los Muchachos o seguir su pista por primera vez podrán hacerlo el 8 de abril, también a las 21, destacan en la organización de los 183 años de Balvanera.  

J.C.

Comentarios