La casa de Bernarda Alba por Ar/TV Trans
En el Hotel Bauen (Callao 360) los viernes 6,13 y 20 de este mes se presentará la obra de García Lorca interpretada por integrantes de la primera cooperativa de teatro trans de la región.
Abasto, Almagro, Boedo, San Cristóbal, Balvanera
En el Hotel Bauen (Callao 360) los viernes 6,13 y 20 de este mes se presentará la obra de García Lorca interpretada por integrantes de la primera cooperativa de teatro trans de la región.
Asàlo comunicaron hoy funcionarios del gobierno en la reunión para diseñar el predio de Belgrano y Jujuy.
En la Legislatura porteña se discute un proyecto para conmemorar este aniversario.
La ONG Buenos Vecinos Once estuvo en Comodoro Py.
El 21 de julio, luego de varios días sin luz y consecuencia de la caída de una vela, se prendió fuego un edificio del pasaje Zelaya, donde viven 27 familias. Hubo heridos que fueron atendidos en el Ramos Mejía. Intervinieron agentes de Bomberos, Policía Federal, BAP, Defensa Civil y la Defensoría del Pueblo de Capital. Varias semanas más tarde, la situación lleva a que las familias acampen frente al inmueble. Por eso, esta tarde, desde las 19, habrá una asamblea de vecinos, agrupaciones sociales y los abogados que ayudan a los habitantes.
Al principio hubo miedo en los vecinos, quienes denunciaron malos tratos policiales. “Pensamos que nos iban a desalojar”, contó a este medio una de las vecinas que hace guardia de noche mientras la mayoría de sus hijos y compañeros duermen. Se higienizan con bidones de agua y quienes pueden se bañan en casas de familiares o amigos.
Ahora las familias cuentan con asesoramiento jurídico y tramitan subsidios habitacionales ante el gobierno porteño. “No podemos entrar al edificio porque tiene peligro de derrumbe la parte trasera, estamos haciendo gestiones para poder ingresar y pagar arreglos y mantenimiento”, agregó el vecino Carlos, también de vigilia.
A una semana del incendio, el día 29, las familias de Zelaya 3126-28 cortaron la esquina de Corrientes y Agüero, frente al shopping Abasto. Ahora, los habitantes de Zelaya, además de las vigilias, tienen asambleas comunitarias al menos una vez por semana. Participan sus abogados, habitantes de viviendas linderas y agrupaciones sociales y políticas, las cuales les han hecho donaciones de alimentos no perecederos y pañales.
“Estamos en la calle por el incendio, antes no había problema con los dueños del edificio. Esperamos que siga así, que se den todas las gestiones y podamos volver a dormir en nuestros hogares”, concluye el vecino Carlos.
J.C.
Fotos: @CharlyFOL