Un 18 de julio como este, pero de 1994 se escuchó un estallido en el barrio de Balvanera. A las 9.53 se venía abajo el edificio de la mutual judía, ubicado en Pasteur 633. Las crónicas periodísticas de la época recuerdan el momento como un gran caos que tomó de sorpresa a la ciudadanía. Gracias al esfuerzo de socorristas, bomberos y vecinos se actúo sobre el lugar. Sin embargo, la tragedia fue inevitable: 85 muertes y decenas de heridos fueron la cara visible del atentado que sufrió el pueblo argentino.

Casi dos décadas más tarde, en el mismo sitio, con el nuevo edificio de telón de fondo, los familiares y amigos renovaron su pedido de “justicia”. "Tu presencia en el acto es un atentado al olvido", fue la consigna del encuentro.

El principal orador de la ceremonia fue el presidente de la mutual israelí, Guillermo Borger. “Diecisiete años de búsqueda sin resultados son demasiados (.). Hoy decimos: no podemos seguir esperando; éste no es un evento político; venimos a santificar los nombres de nuestros muertos", expresó ante la multitud presente.

Entre los cientos que aplaudían los dichos de Borger estuvo la presidente Cristina Fernández junto a gran parte de su gabinete. “agradecemos su presencia, pero no es suficiente. Necesitamos justicia de inmediato", reclamó el presidente de la mutual judía.

Uno de los discursos más encendios, que luego despertó críticas, fue el de Sergio Burstein, referente de los familiares y amigos de las víctimas, quien criticó al actual jefe de gobierno por haber designado como primer jefe de la Policía Metropolitana al ex comisario Jorge "Fino" Palacios. Luego se despachó con el rabino y primer legislador porteño PRO, Sergio Bergman; el presidente de Bolivia, Evo Morales; el dirigente Luis D'Elía; el ex presidente Carlos Menem y concluyó con el periodista "Pepe" Eliaschev.

Por tal motivo, se habló de “politización” durante el acto. Uno de ellos fue Bergman, quien ante la prensa disparó: “Tratándose de Burstein no hace falta dar respuesta a lo que dice sino a la función que cumple: él profanó el acto de la AMIA transformándolo en un acto kirchnerista".

De todos modos, hubo voces a favor de Burstein, tal como lo hizo la titular de Memoria Activa, Adriana Reisfeld dijo este martes que no es "ni kirchnerista ni macrista" y defendió su argumentación. Eso sí, sostuvo que tal "quizás" no fue dicho en el lugar apropiado.

T.L.