La protesta vecinal se desarrolló anoche a las horas de la asamblea a las 18 hs. donde los vecinos se autoconvocaron en contra de las rejas. Algunos medios señalan que los incidentes comenzaron pasadas las 20 hs. Momento en que los  efectivos de la Policía Metropolitana decidieron reprimir con gases lacrimógenos y balas de goma. En total apresaron a 22 manifestantes que esta mañana comenzaron liberar. A su vez anunciaron que los procesarán por “daños”, “resistencia a la autoridad” y “lesiones”.

"Lo único que queríamos mantener era el acceso libre y público al parque", señala un vecino en un video de Infobae. También se quejaron por "no" haber sido "consultados" sobre el vallado, ni haber recibido "un aviso" por parte del gobierno porteño. Asimismo, sostuvieron que la medida pone en riesgo "el trabajo de 700 personas y a sus familias".

Un entrevistado dijo por FM La Tribu esta mañana, en el programa La Mar en Coche, que la Metropolitana no hizo demasiada distinción en quienes detenía ayer, detuvieron “violentamente” a vecinos que poco tenían que ver con el tema, al menos uno que había sacado a pasear a su perro así como un ciclista que andaba de paso. También dijo que habían sido violentos con periodistas que filmaban para medios alternativos.

Para la administración porteña la protesta de anoche fue provocada por intrusos "con intereses creados" que "venden mercadería ilegal" y "no permiten que los vecinos puedan disfrutar de ese espacio verde". El subsecretario de Uso del Espacio Público, Patricio Di Stéfano, indicó a radio Continental que los protagonistas de los ataques contra los uniformados y el daño contra la obra son "manteros, trapitos, cuidacoches con espacios tomados, con actividades lucrativas, que no permiten que los vecinos puedan disfrutar" del parque. Como si eso fuera una menor jerarquía que la de simple “vecino” y retrucan: “el negociado lo hace el gobierno con las empresas constructoras”.

Voviendo al subsecretario, también comentó que se retiraron 12 autos, un colectivo, y 20 carromatos todos abandonados y en mal estado y se colocó una empalizada. Di Stéfano dijo también que "la policía retiró (durante el día) a los ocupantes sin que opusieran resistencia, pero ayer a la noche, pasadas las 21, las mismas personas (sic) que fueron desalojadas tiraron abajo las empalizadas y forcejearon con los efectivos policiales que custodiaban el lugar y después intentaron cortar el tránsito en las inmediaciones".

Según los planes del Gobierno porteño, las obras implican la puesta en valor del Parque Centenario y, a partir de las modificaciones acordadas con la comuna, una parte del parque permanecería cerrada por las noches y la otra sería de acceso irrestricto.

Esta tarde se hará una nueva asamblea vecinal por la problemática de las rejas en Ángel Gallardo y Leopoldo Marechal.

Entre los vecinos hay voces encontradas. Muchos cuestionaban la ocupación y la huerta “en contra de las rejas”. Mientras, los huertistas planteaban que el parque se lo podía cuidar entre todos, sin rejas. Muchos padres con niños chicos preferían no ir cerca, no tanto por olor a porro sino por la tensión continua con la policía. Hoy lejos de eso, y ante una tirantez violenta, los vecinos acostumbrados a hacer uso cotidiano del parque se ven perturbados en éso, dado que el parque permanecerá medio cerrado para implementar las reformas que finalmente impuso, sin consenso y con violencia, el Gobierno de la Ciudad. 

R.S.