El
Dakar recorrerá Áreas
Naturales Protegidas
El festejado y aplaudido
Rally Dakar que en estos
días ha sido una
de las más importantes
noticias, tanto para los
medios masivos, como para
las gacetillas del gobierno
porteño, encuentra
mucha crítica en
el interior. Nos han llegado
múltiples voces que
protestan por el deterioro
que causará al medio
ambiente.
El
tradicional Rally París
Dakar se viene realizando
desde hace más de
tres décadas y este
año, por primera
vez, no recorrerá
suelo africano sino que
se realizará acá
en Argentina y Chile.
Los organizadores sostienen
que buscaron otra geografía
por razones de las amenazas
recibidas. Desde hace días
el festejo de salida se
está realizando en
Buenos Aires, con sede central
en La Rural de Palermo
y ayer con una caravana
festiva por el Obelisco.
Ante tanta fiesta y alegría,
más tanta cobertura
mediática pareciera
difícil cuestionar
semejante movida que hasta
tiene objetivos sociales.
Sin embargo, ya son múltiples
las críticas sobre
el daño ecológico
que sufrirán las
regiones. La razón
es que la caravana,
compuesta por motos, autos
y camiones, no
van por rutas sino que la
aventura está en
atravesar campos (aunque
en un trazado que evitará
los múltiples alambrados
y las plantaciones de soja).
Ante tanto cuestionamiento
preferimos tomar pequeñas
partes de un reclamo
presentado ante la Defensoría
del Pueblo de la Provincia
de Río Negro, por
el Dr. Raúl Bruno
quien rechaza fundamentalmente
el tránsito sobre
la Meseta de Somuncura
que nos enviaron desde la
Fundación Uñopatún.
Con
lujos de detalles que demuestran
su minucioso conocimiento
de las reservas naturales
que traspasará el
Rally Dakar el Dr. Bruno
presenta su rechazo ante
la Defensoría del
Pueblo de la Provincia de
Río Negro con la
intención de salvaguardar
la flora y la fauna de la
zona.
Sostiene,
con sólidos argumentos
que la competencia afectará
“el extremo Sud Oeste
del ANP Meseta de Somuncura,
que es definida como de
extrema fragilidad, por
diversas razones como: sus
suelos débiles o
vulnerables; su cuenca hidrográfica
tan importante en el ecosistema,
como frágil en las
nacientes de arroyos y en
mallines, particularmente;
su profusión de aves
silvestres, autóctonas
y migratorias; y su condición
de hábitat para especies
endémicas, y para
innumerables ejemplares
de la fauna autóctona
definidos como Objeto de
Conservación y como
´especies paisaje´”.
“Estoy
totalmente convencido que
no es viable o prudente
realizar este tipo de pruebas
dentro de los límites
de la totalidad de las Áreas
Naturales Protegidas”
dice, y luego pregunta
¿sino para qué
se crearon las Áreas
naturales Protegidas?
“si no específicamente
para conservar y proteger
lo que en ellas se encuentra”.
Bastante más abajo
en su extenso y bien detallado
reclamo pone que “se
viola la ley 3266 de Impacto
Ambiental”, cuestión
que luego de leerlo no dudamos.
Y luego una seguidilla de
leyes como
las 3266, la de fauna (2056),
la de desarrollo sustentable
(2631), Ley Nacional General
del Ambiente (25.675), y
otras tantas por lo que
solicita una acción
de amparo y una medida cautelar
de no innovar.
En
fin. Si el París
Dakar viene a destruir nuestras
reservas nacionales tal
vez convenga al menos realizar
varios análisis de
impacto ambiental además
de respetar leyes vigentes.
U.K.
Buenos Aires,
3 de enero de 2009