La historia que todos hemos
escuchado
La historia de lo que se percibe, pero no
ve, es una de las posibles definiciones
para Desamor. La tensión de un grito
que está a punto de irrumpir en el
escenario carga de sentido la cotidiana
escenografía donde dos protagonistas
dejan atrás las fronteras entre personajes
y actores.
Marcos debe un favor a
su prima, quien le ha pedido que hospede
momentáneamente a un amigo de ella
que llega a Buenos Aires. Carlos es un joven
de campo que quiere vivir en la ciudad,
dejó todo para cumplir el sueño
de casarse con Sofía, su novia a
distancia.
En el mientras tanto,
Marcos y su nuevo compañero ensayan
una obra que planean estrenar a la brevedad.
Las prácticas quedan relegadas para
los huecos en donde el propietario no asiste
a sus psicoanalizados pacientes o evita
que alguno de ellos se tire de un balcón.
Con el correr de la obra,
la ansiedad de Carlos crece. Volver a ver
a su novia lo desvela. Pero entre el juramento
y la traición no separan muchas esquinas.
Entonces, entre ensayos de teatro y la ausencia
de su amada, el corazón de este joven
cae rendido ante el desengaño. Y
esto es sólo el comienzo de una vuelta
de tuerca en su vida que no tendrá
retorno.
La escena se torna más
intensa, fuera de control. Nada es lo que
parece. La convivencia desata sus consecuencias.
Cada vez más cerca, los personajes
de sus obras a cada paso corren los límites.
Con el tiempo se baja la guardia y queda
expuesto el rostro detrás del actor.
Nace un vínculo profundo que el director
Gerardo Begérez acentúa de
una manera muy concreta.
La obra se despliega como
una hoja que abre sus pétalos de
vez en vez. Uno deja entrever lo que esconde
el otro. Es un carrusel de emociones donde
el grito propio del vértigo busca
un suelo donde estrellarse.
En medio de la intimidad
del departamento de Marcos, por momentos
los espectadores parecen viejas chusmas,
asomadas, en busca del último indicio
de que algo no es lo que parece. Desamor
es la historia que todos hemos escuchado
alguna vez, pero nadie se atreve a contar.
Juan Manuel Castro
FICHA TÉCNICA: Obra: Desarmor.
Dirección: Gerardo Begérez.
Texto: Ulises Puiggrós. Escenografía:
Fernanda Díaz. Diseño de iluminación:
Gerardo Begérez. Fotografía:
Gianni Mestichelli. Diseño de imagen:
Federico Arrico. Teatro El Piccolino Fitz
Roy 2056. Viernes a las 21:30.
Buenos Aires, mayo 2010.