Más Gran
Hermano en la city porteña
El jefe de Gobierno porteño,
Mauricio Macri, inauguró ayer el
nuevo Centro de Monitoreo Urbano que permitirá
controlar el espacio público a través
de un moderno sistema de cámaras
y videograbadoras instaladas en zonas estratégicas.
En un acto de apertura
hoy en la sede del Ministerio de Seguridad
y Justicia, en el barrio de La Boca, Macri
argumentó que la puesta en marcha
de esta unidad “es una respuesta”
del gobierno porteño “frente
a la gran preocupación que genera
en la gente el problema de la inseguridad”.
A su vez destacó también que
la iniciativa está en línea
“con un objetivo prioritario del Gobierno
de la Ciudad, que es recuperar el espacio
público para los vecinos”.
Según
el alcalde porteño “este centro
de monitoreo es el más importante
que existe hoy en la Argentina” y
explicó que “arranca funcionando
con 170 cámaras, aunque vamos camino
a tener 300 en breve y aumentaremos el número
todavía más cada vez que tengamos
margen para seguir invirtiendo”. Según
dijo “desde aquí se trabajará
durante las 24 horas todos los días
del año monitoreando a través
de estas cámaras qué es lo
que está pasando en el espacio público”
y dijo que “cada vez que se detecte
un delito se emitirá un aviso a la
Policía Federal para que intervenga
de inmediato” y también operará
“como una herramienta de enorme utilidad
para llamar al SAME en casos de una emergencia
médica o a la Guardia de Auxilio
ante un accidente”.
En el acto
también estuvieron presentes también
Guillermo Montenegro y la ex vicejefa de
Gobierno Gabriela Michetti.
Según informan
de prensa porteña: este centro está
“dotado con equipamiento tecnológico
de última generación y tiene
la capacidad de monitorear con notable nitidez
imágenes captadas por cámaras
instaladas en catorce parques y plazas,
en las calles aledañas a la Jefatura
de Gobierno y la Legislatura, el Distrito
Tecnológico, los alrededores de Plaza
de Mayo y la plaza Naciones Unidas, en las
adyacencias de la Facultad de Derecho”.
Cuenta con “un
equipo de 120 operadores que monitorearán
las imágenes en tres turnos, bajo
la responsabilidad de un coordinador operativo
y de un coordinador general, y dispondrá
de un video wall central de 3.30 metros
de ancho por 1,80 metros de alto, cuatro
plasmas de 50 pulgadas y 40 monitores LCD
de 20 pulgadas cada uno”.
Dicen que el software
utilizado “impide que se tomen imágenes
de lugares privados” limitando la
visualización al espacio público.
En fin, más
chiches costosos de control que se suman
a la Policía Metropolitana gestante
y al pedido del ejecutivo para que el Gobierno
de la Ciudad tenga su propia “inteligencia
criminal”.
U.K.
