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La justicia falla a favor de medios vecinales contra la censura macrista


Una cuarta parte de los editores que formamos parte del Registro de Medios Vecinal del GCBA presentamos a través de un mismo abogado, el Dr. Miguel Juri, un reclamo judicial contra las recurrentes injusticias cometidas por el Gobierno de la Ciudad que pretende manejar nuestros medios mediante la pauta oficial. La justicia se pronunció a nuestro favor.
     La Comisión Evaluadora es coordinada por la Sra. Rosa Consuelo Yampolsky. Su superior es el director general de Coordinación de Prensa, el señor Carlos Galligani. A su vez el secretario de Comunicación Social es Gregorio Centurión. Todos pertenecientes a la Secretaría de Comunicación Social.
       Las injusticias cometidas son incontables. Una muy grave que por ahora no se ha tenido en cuenta para seguir un camino legal es el terrible atraso y desorden en los pagos que, sumado a la crisis, ha dejado a más de un medio en el camino. En julio del 2008, cuando asumió la nueva coordinadora, nombrada más arriba, enviaron arbitrarias cartas de “toma conocimiento” a gran parte de los medios del Registro señalando supuestos incumplimientos. En los casos que se pudo dialogar y llegar a un entendimiento se hizo de modo oral, no con notas de disculpas.
     A principios de diciembre deciden directamente dar de baja de la pauta oficial a catorce medios en ese mes. Notamos el aval de Galligani en una reunión donde nos habían convocado para elegir veedores (que son los colegas elegidos como intermediarios para controlar que las decisiones que tome la Comisión sean correctas y no arbitrarias). Vale recordar que dicha reunión tuvo una citación por correo electrónico de apenas veinte horas de antelación. Ahí no solamente se informa verbalmente que catorce medios quedan sin pauta publicitaria en diciembre, sino que también se adelantaría el Registro 2009 para comenzarlo en enero y no en abril como se venía haciendo desde el comienzo de dicho registro (cuyo funcionamiento data del 2002).
       La consecuencia fue que los veedores notaron que trece de los catorce medios quedaría fuera de la pauta oficial para el Registro 2009 y además había unos cuantos en situación crítica. La reacción de nuestro veedor digital, Ariel Rosales, fue impugnar semejante atropello. Más cuando el nuevo instructivo se intromete en la parte del contenido convirtiendo a la Sra. Yampolsky y al Sr. Galligani en una suerte de jefes de redacción de nuestros medios. El veedor gráfico, Víctor Pais, impulsado desde la Cooperativa de Editores Barriales de donde ya habían enviado Recurso de Reconsideración, presenta una nota de queja ante las evaluaciones mal hechas.
     A su vez, y como acción poderosa hubo un fuerte rechazo por otro gran grupo de editores que redactamos y acompañamos una carta colectiva de repudio titulada “Macri viola la libertad de expresión”. Ésta nos ha acercado -más allá de a personas y grupos que defienden la libertad de expresión y que están en contra de la extorsión mediante la pauta publicitaria oficial- a muchos legisladores porteños y algunos nacionales, de diferentes bloques, porque notaron que ´algo huele mal en Buenos Aires´. Incluso miembros del PRO.
    Además nos juntamos varios de los representantes de los medios apartados en diciembre, con la consecuente exclusión del 2009, más unos cuantos editores que por el momento no habían sido “amonestados” y realizamos un reclamo judicial. Que tengamos noción es el primero en la historia del Registro de Medios Vecinales. Se trata de una acción de no innovar y un pedido de amparo. Los que acompañaron, más allá de hacerlo por cuestiones solidarias lo hicieron porque son concientes que con el criterio actual estamos todos en la cuerda floja.
       La buena noticia es que la jueza Zulema Liberatori, titular del Juzgado de Feria Nº 4 del Fuero C.A.yT. de la CABA resolvió: “habilitar la feria a fin de resolver y diligenciar la pretensión cautelar solicitada”. Y “suspender los efectos del Instructivo para la Inscripción en el Registro de Medios Vecinales de Comunicación Social”. Y también “la suspensión de los efectos de los actos administrativos dictados por la Secretaría de Comunicación Social, por los que se excluyó a los medios presentantes del Registro de Medios vecinales de Comunicación”. Así que ahora la Secretaría de Comunicación Social tiene obligación de dejar sin efecto las exclusiones efectuadas en 2008 y 2009, por lo que todos los medios actuantes, tienen que ser incorporados al Registro y recibir la pauta publicitaria correspondiente.
      Si bien la medida solo alcanza a los 17 actores firmantes de la demanda puede ser un importante precedente donde los pequeños editores independientes dijimos basta. ¡Basta de manoseo, de maltrato y de discriminación! Somos los portavoces de los barrios y pretendemos hacer valer los derechos adquiridos democráticamente para poder recibir lo acordado por ley de publicidad oficial.
Ahora, si nos quieren sacar deberán argumentar sin patoterismo burocrático. Deberán seguir la ley. Nosotros tenemos a nuestro favor los medios publicados donde la verdad de que cumplimos con lo exigido por la ley salta a la luz.
     No es legal que pretendan manejar los medios por poner un aviso. Tenemos derecho a opinar diferente y cuestionar. ¡Basta de pretender extorsionarnos! ¡Basta de corrupción! ¡Estamos en democracia y defendemos la libertad de expresión!
    ¡Será justicia!

Rafael Sabini

Buenos Aires, 12 de enero de 2009

Notas de referencia: Macri viola la libertad de expresión




 
 


 

 

 

 

 

 

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