Cerca de 500 alumnos de establecimientos públicos dejarán de hacer deporte en el complejo de Gallo y Perón.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a través del Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte, construirá el Parque de la Estación, un pedido vecinal con casi 20 años de vigencia para ganar verde, en las tierras ferroviarias en torno a Gallo, Perón, Anchorena y las vías del tren Sarmiento. La empresa adjudicada se llama Cunumi y cobrará $117.627.468 por 12 meses de labores. Sin embargo, en la esquina de Gallo y Perón está el complejo de canchas Salguero Fútbol Sucursal Abasto, donde varias escuelas públicas del barrio, cerca de 500 estudiantes, hacen actividades deportivas en forma gratuita. No hay una respuesta oficial sobre dónde entrenarán una vez iniciadas las obras.
“En el Ministerio de Educación de la Ciudad nos felicitan por la tarea que hacemos, pero en el Ministerio de Desarrollo Urbano nos dicen que nos tenemos que ir porque empiezan a hacer el Parque”, dice a este medio Mauro, uno de los responsables de Salguero Fútbol Sucursal Abasto, donde trabajan ocho personas. “No estamos en conflicto. Que hagan el Parque, pero que respeten los dos meses que le quedan al ciclo lectivo. Que arranquen las obras, pero que no sea integral. El predio es grande, que en este rectángulo (donde están las canchas) dejen que siga la actividad deportiva y después nos vamos en diciembre”, agrega.
En este lote con cerca de 4.000 metros cuadrados hay que “coordinar para que los horarios de los colegios no se superpongan”, dice Mauro para dar cuenta del nivel de concurrencia. En la semana pasan cerca de 500 estudiantes de la Escuela Normal Superior N° 7 José María Torres, la Escuela de Comercio N° 25 Santiago de Liniers (Corrientes 4261), Escuela Técnica N° 26 Confederación Suiza (Jujuy 255), Colegio N° 5 Bartolomé Mitre, Colegio 14 Juan José Paso (Valentín Gómez 3163). También hacen actividades personas discapacitadas de un centro de día de la avenida Díaz Vélez.
El contrato de Salguero Fútbol estaba vigente desde 2013 y regía cinco años. Vence ahora, pero tenía posibilidad de extenderse tres años más. “Les pedimos que nos renueven. Tuvimos una reunión con la gente de concesiones de la Ciudad. Esto antes era ferroviario, de Nación, ahora pasó a la Ciudad. Hace 15 días dijeron que nos iban a reubicar en un predio bajo autopista en 24 de Noviembre, donde hoy está Urquiza Tenis. Pero todo cambió en dos días. Dijeron que ahí no vamos a ir y que nos tenemos que presentar en una licitación pública (suele encargarse el Ministerio de Modernización de estos asuntos)”, suma.

“También dijeron que nos iban a dejar estar hasta diciembre. No sabían que había tantos colegios estatales haciendo actividad gratis. Igual no les importó. Nos dijeron en Desarrollo Urbano que había que dejar el terreno ya, que las obras del Parque empezaban sí o sí en octubre. Así los colegios quedan en bolas. Encima, la Ciudad no da contención física.Hay lugares para hacer deportes como el Circuito KDT (camino a Costanera Norte) pero sale carísimo el traslado”, cuestiona Mauro.
Recordemos que en el proyecto de Suma+ se contemplaba este complejo de canchas y al haberse aprobado uno podría interpretar que seguían, claro que luego vino la planificación colectiva y ahí no se lo contempló.
En cuanto a movilidad, Soledad, que es profesora de educación física en la escuela Mitre, cuenta que con sus estudiantes entrenaban en la Escuela de Deportes Nueva Generación (Quintino Bocayuva 1241) de Boedo o en un polideportivo de Colegiales. “El tema es que cada alumno iba por su cuenta. El ausentismo era grande. Desde hace cuatro años hacemos actividad acá y eso no sucede más. Es más seguro porque estamos cerca de la escuela”, agrega. “En la dirección de la escuela están al tanto de lo que pasa, pero tampoco les han dado una respuesta sobre qué va a pasar a futuro”, añade.

Mauro dijo que existe una ley porteña que permite hacer concesiones en terrenos públicos con más de una hectárea de extensión. El Parque de la Estación estaría incluido. “En el Parque Las Heras de Palermo por ejemplo hay un complejo de canchas y funciona lo más bien. No entiendo por qué acá no se puede dar una solución similar”, agrega.
En la charla con este medio Mauro muestra cartas enviadas por las autoridades de estos colegios. Los directivos muestran su agradecimiento por la “buena predisposición y cesión del predio”. “Este es un terreno que en definitiva es del Estado, es de mala fe si uno no colabora con la comunidad. Por eso nos preocupa saber qué va a pasar con la actividad física de los chicos del barrio y también nos enoja que nos hayan cambiado las reglas a mitad de camino con el complejo de canchas. Esperemos que haya una solución para todos”, concluye.

J.M.C.