El
globo de la globalización
En el transcurso
de las últimas décadas
los argentinos oímos
hablar con sospechosa naturalidad,
de una supuesta cultura
globalizada. Este dudoso
proceso con olor a verso,
indudablemente pernicioso,
tiene como objetivo reemplazar
totalmente las culturas
regionales y nacionales,
los elementos de esta supuesta
cultura globalizada en constante
gestación son introducidos
por los medios de comunicación
masiva, generalmente, manejados
por los grupos que dominan
las económicas en
el contexto internacional.
Esta intromisión
que perjudica nuestra
identidad, es acompañada
por muchos complacidos alcahuetes
que además de acatar
las órdenes, imitan
a los globalizadores, con
la pretensión de
vendernos sus productos
reciclados. (La voz del
amo con nuestras palabras).
Evaluando
lo que acontece en el mundo
tanguero, afortunadamente
advertimos un promisorio
florecer, insospechado hace
sólo un par de años,
Milongas, espectáculos
en pleno desarrollo, Aunque
la radio y, principalmente,
la televisión permanezcan
indiferentes a esta movida
tanguera. Especialmente
este último medio,
no le hace ningún
favor a lo nuestro, ya que
no existen en la televisión
abierta programa de tangos
y en cuanto al folklore,
exceptuando el canal oficial,
tampoco y esto es más
que preocupante.
Debemos procurar revertir
esta situación, concientizarnos,
participar, comprender que
lo nuestro merece ser respetado:
música, cine, literatura,
industrian y si es bueno,
vale. Demostrar que no necesitamos
un tío con guita
que nos digite los gustos.
A
las nuevas expresiones tangueras
se les hace difícil
su participación
en los medios. Radio y televisión
prefieren lo comercial,
el ruido, lo ajeno a nuestra
idiosincrasia. Esto se agrava
porque muchos de los que
difunden nuestra música
se resisten a lo nuevo.
Prefieren pasar una obra
que no es buena de los años
30, 40 o 50 y no un tango
bueno del tiempo nuevo.
Manuel Luis Paredes
Bs. As. 13/4-2006